Obligado por la "delicada situación financiera" que atraviesa -reconocida ayer mismo por su presidente-, el Puerto de A Coruña se lanza a buscar apoyos para completar las obras de Punta Langosteira. Enrique Losada acaba de enviar un mensaje a Fomento y Puertos con el objetivo de que "colaboren" y "posibiliten" la inversión necesaria para construir el enlace ferroviario del puerto exterior, una infraestructura presupuestada en 120 millones de euros. El responsable de los muelles herculinos lanzó el guante a las dos instituciones estatales -además de "a Ferrocarriles"-, a las que insta a "arbitrar algún tipo de fórmula" que libere al organismo que preside de tener que pedir un nuevo crédito.

Durante el mismo acto en el que reclamó esas "fórmulas", Losada reconoció que el Puerto de A Coruña no encara sus mejores números. "La situación financiera es delicada", anotó, en referencia a los 315 millones de euros de deuda que encara el organismo, cuya facturación anual se sitúa en 25 millones. De hecho acaba de refinanciar sus créditos con el Banco Europeo de Inversión y Puertos del Estado, lo que le permitirá trasladar 40 millones que debía amortizar a lo largo de los próximos diez años.

Desequilibrio

A pesar de ese hándicap, el gestor coruñés insiste en que la salud económica de los muelles es "buena, muy buena". "Existe un desequilibrio entre la facturación y la deuda que se ha asumido para la construcción del puerto exterior, pero el futuro es muy esperanzador".

En esa línea, recordó que en 2016 el organismo logró una cifra de negocio de 27,6 millones, coincidiendo -apostilló- con "una evolución del puerto exterior francamente buena". Ayer mismo anunció que se espera una inversión de 30 millones de la firma Deep Water Oil Transhipment Hub, que planea estar operativa en 2019.

La intervención de Losada llega solo unos días después de que se hiciese público un informe del Tribunal de Cuentas en el que se arrojan dos conclusiones críticas sobre Langosteira: primero, que las previsiones de ingreso que se manejaron en 2004 eran irreales; y segundo, que los trabajos han incurrido en un importante sobrecoste que el tribunal fija en un 27%.

El gestor herculino se esforzó en rebatir esas afirmaciones. Argumentó que el contradique que se ha construido en Langosteira no se puede considerar un sobrecoste, sino "una obra más", lo que rebajaría el desvío del presupuesto inicial a un 8,7%. También culpó a sus antecesores de planificar "una inversión que no era suficiente para que el puerto exterior pudiese operar". Llegó incluso a hablar de un ahorro en las obras de 33 millones. Con respecto a la estimación de ingresos, mentó la crisis e insistió en que el proyecto no se lanzó "por razones económicas, sino para alejar de la ciudad tráficos que generan problemas medioambientales".

Desde el inicio de las obras Langosteira ha acumulado una inversión que ronda los 748 millones, cifra a la que aún se debe sumar el coste del enlace ferroviario y el viario. En su informe, el Tribunal de Cuentas ya advertía que el Puerto tendría que hacer frente en solitario a los costes del tren al haber rechazo su financiación Fomento y la UE. El documento descarta además que Langosteira disponga de ese servicio antes de 2021.