"Qué poco dura lo nuevo. Es que ya ni lo útil se respeta". Desconcertados, molestos y abiertamente indignados se mostraron ayer los vecinos del entorno de la calle Camelias y Menéndez Pelayo al ver cómo el primer y flamente ascensor urbano de Vigo dejaba de funcionar desde el pasado domingo. Además en esa zona rehabilitada se produjeron las primeras pintadas y destrozos.

Hoy se cumple un mes desde que se pusiese en marcha este elevador para salvar un desnivel de 20 metros, por ello los vigueses no se explican cómo en tan solo 30 días su maquinaría dijo 'basta'. La presencia de los grafitis en la cabina de acceso al ascensor hace que muchos vecinos atribuyan su avería a actos vandálicos.

Xacobe Segueiro

"No veo normal que tiren piedras al ascensor"

Usuario del ascensor.

"De verdad que no entiendo cómo puede haber gente que le guste estropear elementos urbanos de los que nos aprovechamos todos. No tiene lógica alguna", lamenta el joven Xacobe Segueiro. Él, como tantos otros, se disponía a utilizar el ascensor y se ha quedado asombrado ante su pronta avería.

"Me da mucha pena sobre todo por la gente mayor; esto les daba la vida a muchos, era muy útil para los vecinos, se atajaba un montón y ahora otra vez dar la vuelta", explicaba Rubén Bernárdez. Otros como Juan López veían en él un servicio real, "sobre todo en épocas de lluvia. Yo veía continuamente subir y bajar a la gente; de verdad se le estaba sacando partido. Fue una instalación muy positiva y ahora volvemos a estar como antes".

Rubén Bernárdez

"Ahora tendremos que volver a dar una gran vuelta"

Usuario del ascensor.

Noa Villar

"Me molestaría mucho si alguien lo hubiese estropeado"

Vecina de la zona.

El elevador podía mover cientos de personas en una hora. Muchas de ellas bajaban de la parada del autobús que se encuentra en frente ya encaminadas a tomar el ascensor, situación que ayer se repitió pero con diferente final. Los vecinos se quedaban perplejos ante el cartel de "Fuera de servicio. Trabajos de mantenimiento".

La buena noticia es que este parón verá su final mañana. Los técnicos han estado trabajando en el motor del ascensor desde el lunes colocando pesos y averiguando el motivo de la avería.

Según fuentes municipales la causa del parón se debe a que la placa del control del variador, situado en el cuadro de maniobra, se ha estropeado. Aunque todavía no hay una certeza si la avería fue causada por actos vandálicos o por el deterioro de la misma, una causa esta última bastante inverosímil, pues la pieza suele tener una duración de diez años y no de apenas un mes. Dicha pieza llega esta tarde, por lo que técnicos y Concello confían en que a primera hora de mañana el ascensor vuelva a estar funcionando.

Para evitar que esto vuelva a ocurrir, al igual que las pintadas, muchos vecinos demandan la presencia de cámaras de seguridad. Estas ya han sido colocadas, una en la entrada de Camelias y otra en Menéndez Pelayo, y serán activadas cuando el elevador vuelva a estar en funcionamiento.

Alberto Díaz

"Lo nuevo siempre se estropea antes de lo previsto"

Usuario del ascensor.

José Cid

"Las cámaras evitarán destrozos de vándalos"

Usuario del ascensor.

"Las cámaras de seguridad son muy necesarias. A partir de ahora los vándalos o quienes intenten dañar el ascensor saben que se les está grabando e igual se lo piensan dos veces", explica José Cid.

"Si de verdad han sido unos gamberros, nos han fastidiado a muchos. Los padres con los niños, los señores mayores... había mucha gente empleando el ascensor. Para una vez que se instala algo útil, ni eso se respeta. Seguro que con las cámaras tendremos más seguridad", argumenta Manuel Camino.