"Mi apuesta por el diálogo y el acuerdo en defensa de los intereses de Vigo es firme, permanente y no tiene marcha atrás. Promoveré todo pacto que beneficie a la ciudad, al interés general, y mejor si es pronto que tarde". El alcalde Abel Caballero pretende poner en marcha está máxima "al día siguiente de tomar posesión", es decir el 14 de junio. Entonces enviará sendas cartas al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y a la ministra de Fomento, Ana Pastor, para solicitarles un encuentro en el que analizar las asignaturas pendientes con la ciudad.
"Yo creo que el diálogo es conveniente, necesario y lógico entre administraciones, y ahora con el nuevo escenario político abierto en Vigo lo es más que nunca. El señor Feijóo debe reflexionar sobre qué resultado le ha dado la política del no, y si está dispuesto a seguir instalado en ella", asegura el regidor vigués, que acaba de ganar las elecciones municipales con 17 concejales de 27 posibles, relegando al Partido Popular a sólo siete.
Caballero reveló ayer que el presidente gallego le había llamado por teléfono para felicitarle por su "muy contundente victoria". La comunicación, de cortesía, puede, sin embargo, abrir la puerta a una relación más fluida después de años de controversia y disputas. "Ha llegado el momento de que se establezca la normalidad institucional. Es una cuestión de lógica política. Yo siempre le he ofrecido mi mano tendida, pero fue él [Núñez Feijóo] quien hasta ahora la había rechazado. Yo se la vuelvo a tender otra vez y espero que la respuesta no sea otro no", asegura.
El alcalde recuerda que en los últimos cuatro años le ha enviado tres cartas solicitándole un encuentro, pero que no recibió contestación de ninguna de ellas. Es más, Caballero ha sido el único alcalde de una gran ciudad gallega que no tuvo un encuentro formal con el titular de la Xunta en el último mandato.
"Tras lo ocurrido el pasado domingo se ha abierto un tiempo político nuevo en Vigo y en Galicia, y todo el mundo tiene que entenderlo así. A nosotros nos acaban de votar muchas personas que en ocasiones anteriores lo habían hecho a otras opciones políticas como el PP. Son personas que no han votado por unas siglas, sino por ciudad. Así que ahora contamos con un respaldo inmenso de los vigueses, un apoyo como ningún alcalde había tenido en la historia de la ciudad. Y esto es algo que todos deben de tener muy en cuenta. Ha llegado el momento de que entiendan este mensaje tan claro y reaccionen en consecuencia", advierte.
"El gobierno local juega un papel clave en el desarrollo de la ciudad, pero el papel de la Xunta no es menor. Toma decisiones que afectan a todos los vigueses y por eso se hace imprescindible el diálogo, y cuanto antes mejor, aunque entiendo que hay que respetar los tiempos políticos", remacha.
La actitud de diálogo que expresa respecto al presidente Núñez Feijóo también es trasladable a la ministra de Fomento, la pontevedresa Ana Pastor. "A ella le remitiré otra carta solicitándole una entrevista. Hay cuestiones determinantes sobre las que hablar y llegar a acuerdos: la reforma de la Avenida de Madrid, el operador comercial para la estación del AVE en Urzáiz o la conexión con la Alta Velocidad por Cerdedo", resume.
Por otra parte, el alcalde enfatizó que tras el histórico apoyo conseguido en las urnas, el gobierno local está "en condiciones de poner una marcha más en la ciudad al proyecto Vigo, porque así nos lo acaban de pedir los ciudadanos con sus votos".