Los ciclos de Formación Profesional ganan alumnado de manera imparable y en Vigo podrían hacerlo a un mayor ritmo si la Xunta ampliase los cupos máximos de estudiantado en la enseñanza pública y habilitase más profesorado. La matrícula en cursos de grado medio y superior creció este año en Vigo un 9,7% con respecto al ejercicio 2009-2010, pero las direcciones de los institutos públicos aseguran que han dejado decenas de peticiones sin atender. "No se está cubriendo toda la demanda porque hay un incremento espectacular de solicitudes", explica María José González, jefa de estudios del CIFP Valentín Paz Andrade. En algún curso el centro llegó a recibir "80 inscripciones para una clase cuyo tope es de 22 alumnos", por lo que trabajan para solicitar al Ejecutivo que amplíe sus titulaciones.

Desde el Gobierno gallego piden unos meses antes de pronunciarse sobre una posible ampliación de la oferta en la ciudad olívica, hasta que el director xeral de FP e Innovación Educativa, José Luis Mira, se reúna con los directores para analizar las necesidades globales. Mientras esto sucede, el cierre provisional de la matrícula revela que todos los centros vigueses ganaron este año 609 estudiantes, batiendo un nuevo récord con 6.862.

En centros como el IES Manuel Antonio, con un límite de 22 alumnos por clase, su único margen de maniobra para incorporar gente es cubrir las bajas y las dos o tres plazas de los ciclos menos demandados que otros años quedan desiertas y ahora se ocupan en el mismo día. Imparte formación de grado medio y superior de las familias profesionales de Hostelería, Industrias Alimentarias, Química, Sanidad y Textil y sus responsables reconocen que "se ha quedado mucha gente fuera. Completamos incluso los puestos que otros años quedan libres porque hay mucha gente que aprovecha que no tiene empleo para mejorar su formación", argumentan.

Las limitaciones a las que se enfrenta para incrementar su alumnado se repiten en los demás centros: profesorado y cupo máximo de personas por clase. Y las razones con las que explican el creciente interés por la FP también son compartidas por el resto del sector. En la base figuran un mercado laboral cada vez más competitivo que exige personal cualificado y una elevada tasa de empleabilidad entre los titulados. A esta circunstancia se ha añadido el crecimiento del desempleo, que ha llevado a jóvenes y también a cientos de adultos a aprovechar su inactividad laboral para mejorar sus capacidades y ampliar currículo.

Un ejemplo paradigmático de la rigidez de la matrícula en los centros es el IES Politécnico de Vigo, que dispone de una amplísima oferta y a pesar del creciente interés por la FP se mantiene por tercer año consecutivo en 446 estudiantes.

Al margen de las dificultades de acceso, los datos de la Consellería de Educación revelan que la evolución de los ciclos medios y superiores va pareja a la realidad económica del país. Así se desprende del hecho de que junto a Fabricación Mecánica e Informática, uno de los pocos ciclos que no crecen en Vigo son los integrados en Edificación y Obra Civil, muy ligada al sector de la construcción y que se queda con 232 estudiantes. En el extremo contrario se sitúan Comunicación, Imagen y Sonido, que aumentó un 27% su alumnado, y las enseñanzas sanitarias, que según los datos de la Consellería de Educación captaron en la ciudad 1.234 plazas este curso, frente a las 984 del anterior.

Al margen del contexto económico desfavorable, otro de los factores que desde el IES Manuel Antonio apuntan para entender la expansión de la Formación Profesional es la configuración de los nuevos títulos. Las comunidades los están adaptando al espacio europeo de educación y los nuevos grados están ya asociados a unidades de competencia facilitando la convalidación de experiencia laboral a su alumnado.

Estas facilidades explican tanto la subida de casi el 10% experimentada por la FP en Vigo como el 10,7% registrado de forma conjunta en todos los centros de la comarca, que suman ya 7.866 alumnos de los 34.301 matriculados en toda Galicia.