Cuenta atrás para una nueva huelga del servicio de recogida de basura en Vigo. Los trabajadores ven “imposible” llegar a un acuerdo el fin de semana y dan por seguro que desde el lunes por la mañana empezarán a aplicarse los servicios mínimos.

“La huelga para el lunes es indiscutible”, explicaba ayer el presidente del comité de empresa, Rufino Santalices, quien explicaba que no había avances en las últimas horas y tampoco cita para una nueva reunión que acercase posturas durante el fin de semana.

Aunque se les convoque de urgencia para hoy, sostiene el portavoz de los empleados de FCC que “no daría tiempo a parar la convocatoria, ya que cualquier preacuerdo tendría que ser ratificado en asamblea por todos los trabajadores, que no se juntarían hasta el lunes”. No aguardan sorpresas de última hora.

El representante de la plantilla señaló que la cuestión de la jornada es una condición "irrenunciable", puesto que ya les correspondía con el anterior convenio, y apuntó que tampoco estarán dispuestos a que la empresa "rebaje los salarios entre un 7 y un 10 por ciento".

Días atrás, Santalices señaló que se trata de un problema por el que "los dos organismos (Ayuntamiento y empresa) se tienen que sentar a negociar para llegar a un acuerdo". Así, afirmó que a los trabajadores "no les queda más remedio que ir a la huelga" para conseguir sus objetivos, sobre los que aseguró que "no son un capricho". Según añadió, la plantilla está formada por unos 370 efectivos y el salario base ronda los 1.000 euros.

Por su parte, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, consideró el pasado viernes que el conflicto es un problema entre la empresa y los trabajadores e instó a las partes a que "no dejen de negociar", para así evitar que la ciudad se vea sometida a una huelga en los servicios de recogida de basura. En cuanto a la reivindicación sobre las ampliaciones de servicio, el regidor socialista evitó "entrar en debate" con el comité de empresa, y volvió a instar a la firma y a los trabajadores a que negocien.

CONFLICTO

El presidente del comité denunció que, en las negociaciones con la empresa sobre el convenio colectivo para este año, FCC presentó una oferta "inamovible" que supondría bajar los sueldos "entre un 7 y un 10 por ciento", dependiendo de las categorías. En este sentido, aseguró que los trabajadores no aceptan que se les rebaje "cuando FCC no es una empresa en crisis y tiene beneficios de cientos de millones de euros".

En cuanto al problema de la jornada laboral, reside en el "incumplimiento" del anterior convenio colectivo --cuya vigencia terminó a 31 de diciembre de 2008-- puesto que en él figura una ampliación del servicio por el que la plantilla trabajará de lunes a viernes, descansando el sábado. Sin embargo, actualmente los empleados trabajan de lunes a sábado y libran un día durante la semana.

Santalices explicó que el Ayuntamiento de Vigo no ha aprobado las ampliaciones del servicio, que se realizan para ajustar la actividad de limpieza a los incrementos derivados de la ejecución de humanizaciones y nuevas áreas en la ciudad que antes no existía.

Así, precisó que mediante estas ampliaciones, acordadas entre empresa, Ayuntamiento y trabajadores, se articularía la jornada laboral en horario de lunes a viernes y que, según lamentó, ya debería estar aplicándose. Además, explicó que este ajuste serviría para crear empleo, puesto que haría falta aumentar la plantilla para el turno de fin de semana.

Santalices responsabilizó al Ayuntamiento de esta situación puesto que, según añadió, todavía no ha aprobado las ampliaciones y, por tanto, no se puede aplicar el nuevo horario. Sin embargo, pese a que se han puesto en contacto en varias ocasiones con ellos, aseguran que desde el último año, los responsables del área de Limpieza --que actualmente lleva la edil Raquel Díaz-- "pasan olímpicamente" y no les han recibido.