La Xunta rechaza asumir la homologación de títulos extranjeros de Medicina

El Gobierno ofrece a las comunidades esta competencia, tras cedérsela al País Vasco

carlos gayoso

La Xunta rechaza reclamar al Gobierno central la competencia para la homologación de titulaciones médicas extranjeras en enseñanzas universitarias después de que el Consejo de Ministros aprobase, de manera pionera, el traspaso de la responsabilidad al Gobierno del País Vasco, que entrará en vigor el próximo 1 de julio. La Consellería de Sanidade señala que esta prerrogativa “debe ser una competencia estatal establecida por una directiva europea”, una valoración que se produce apenas un día después de la toma de posesión de Antonio García Caamaño como titular de la cartera autonómica.

La ministra de Universidades, Diana Morant, afirmó que las comunidades autónomas que soliciten adquirir esta responsabilidad tendrán “la misma respuesta” que el Ejecutivo vasco, algo que, desde Sanidade, no ven con buenos ojos. “No tiene sentido que los criterios para homologar los estudios extranjeros se apliquen de forma distinta entre las comunidades”, traslada el departamento autonómico, que, además, asegura que las intenciones del Ejecutivo central van en contra de los preceptos constitucionales. “La Constitución recoge como competencia exclusiva del Estado la regulación de las condiciones para obtención, expedición y homologación de títulos académicos”.

Según datos oficiales del Ministerio de Universidades a fecha de septiembre de 2023 –los últimos disponibles–, a nivel estatal todavía hay más de 50.000 expedientes de extranjeros sin revisar y 30.000 incompletos. Además, el propio Ministerio reconocía en aquel momento que entraban 5.000 casos nuevos al mes, lo que situaba el total en unos 100.000 aproximadamente en toda España.

Lo cierto es que la cesión de esta competencia al País Vasco no ha sido acogida de manera positiva dentro del sector médico. El presidente del Consello Galego de Colexios Médicos, Eduardo Iglesias, advierte que la homologación de títulos extranjeros es un proceso “donde existen muchos matices”. “La mayoría de titulaciones europeas ya no requieren homologación y las que tienen convenio con las universidades de aquí imparten un plan de estudios muy similar”, señala. “El problema está cuando se pide homologar titulaciones de países donde existe una formación muy diferente. Ahí es cuando hay que mantener unos criterios únicos y muy exigentes”, indica. Castro también advierte de que esas homologaciones no implican la posibilidad de ingresar inmediatamente en el Servizo Galego de Saúde . “Esos médicos podrán ejercer en la sanidad privada pero para poder ejercer en el Sistema Nacional de Salud (SNS) es necesario tener la especialidad de Medicina Familiar”, apostilla. Y añadió que esto no solucionará el déficit de médicos de Primaria.