El Tribunal Económico da la razón a 8.500 gallegos para pagar menos impuestos

No todos los contribuyentes aceptan a la primera sus obligaciones fiscales. Hay quienes reclaman para poder rebajar la factura, ya sean particulares o empresas, por estar en desacuerdo con la cantidad, considerar que es excesiva o entender que el cálculo es erróneo. En 2022 apostaron por esta vía algo más de 17.000 gallegos, que recurrieron al Tribunal Económico-Administrativo (TEAR), un órgano independiente adscrito al Ministerio de Hacienda encargado de dirimir los conflictos tributarios entre contribuyentes y la Administración.

La cifra de quejas fue un poco inferior a la del año anterior, pero lo que verdaderamente cambió fue la celeridad con que resolvió el TEAR las reclamaciones, llegando a números de récord. Se pronunció sobre 20.267 reclamaciones, la cifra más alta de su historia en un año, que tuvo como consecuencia que también se alcanzara un elevado número de resoluciones a favor de los contribuyentes, ya que dio la razón (total o parcialmente) a 8.471, que vieron como su factura fiscal sí se redujo.

Claro que para llegar a esta cifra el tribunal ha tenido que realizar un importante esfuerzo por desatascar las quejas acumuladas de años anteriores, cuestión en lo que ha resultado capital “la implantación de soluciones tecnológicas”. En el año 2022 se ha producido un incremento en el número de reclamaciones presentadas en el conjunto de España, hasta un total de 230.043, lo que supone un incremento del 8,10% con respecto a las presentadas en 2021, aunque en el caso de Galicia la tendencia fue inversa, pues, si bien fue ligera, se registró una contracción.

Vías de reclamación

Por cada comunidad hay un Tribunal Económico-Administrativo y hay otro central, a los que se puede acudir tanto por los impuestos gestionados directamente por el Gobierno central como por los cedidos a las comunidades autónomas cuando no se está de acuerdo con el cálculo y la cantidad resultante a pagar o se entiende que hay errores, por ejemplo. Por norma general tienen un año de plazo para resolver las reclamaciones y transcurrido ese tiempo sin respuesta se entiende que quedan desestimadas y el contribuyente puede recurrir a la justicia ordinaria.

El pasado año en el Tribunal Económico-Administrativo de Galicia se presentaron 17.046 reclamaciones (17.393 en 2021) y se resolvieron 20.267. De esta últimas, sobre el 41,8% el TEAR dictaminó que el contribuyente tenía razón frente a la Administración y así lo estimó total o parcialmente en 8.471 dictámenes.

Motivos

¿Cuál fue el principal motivo de queja de los gallegos? Pues el IRPF, como suele ser habitual en todos los años. Se tramitaron 5.719 reclamaciones y se resolvieron 7.462, dado que las había acumuladas de años anteriores. A favor de los demandantes se firmaron 3.431 resoluciones, que fueron los contribuyentes que ganaron su “litigio” para reducir la factura fiscal.

En segundo lugar figura la ejecución, por parte de la Administración, del procedimiento recaudatorio, que puede incluir recargos o sanciones por demora o impago. Por esta causa se presentaron 3.645 quejas, pero el TEAR en este apartado no suele dar la razón a los ciudadanos. Por eso, solo aceptó como válidas 508 reclamaciones, totalmente o en parte.

En tercera posición aparece el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, este gestionado por la Xunta. Motivó 2.057 recursos y se resolvieron 2.095 –debido, de nuevo, a los casos acumulados de años anteriores–, de los que 864 se solventaron a favor de los ciudadanos y las empresas.

Hubo un mayor porcentaje de respaldo a las reclamaciones en las referidas al IVA y al Impuesto de Sucesiones y Donaciones. En el caso el primero se presentaron 1.960 quejas y se resolvieron 2.452, de las que 1.462 fueron en contra de la Administración. En cuanto a las herencias, se tramitaron 1.484 recursos y se finalizaron 2.509, de los que casi la mitad (1.064), resultaron a favor de los ciudadanos.

Suscríbete para seguir leyendo