Trece detenidos en la provincia de Pontevedra, varios más en Portugal, y cuatro “narcolanchas” intervenidas. Este es el balance provisional de la “Kerumán-Samario”, la operación contra el narcotráfico que estalló ayer en varias poblaciones de las Rías Baixas y el norte portugués. Como sucedió con la redada de hace apenas un par de semanas, esta última pretendía cortar el cordón umbilical que une a los traficantes gallegos con los clanes que operan entre Marruecos y el Sur de España.

La operación fue desarrollada por el EDOA de la Guardia Civil y la Udyco de la Policía Nacional. Su objetivo es desmantelar una presunta organización que se dedica tanto a la construcción de planeadoras como al tráfico de hachís entre Marruecos y la península Ibérica. La primera detención ya se produjo el sábado pasado en Algeciras y la juez de Cambados que coordina la investigación ordenó a media tarde de ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del arrestado. Este no es otro que el presunto líder de la organización, Francisco Javier Otero Magdalena, un veterano piloto de planeadoras, nacido en O Grove hace 52 años y curtido en mil batallas.

En enero de 2021 guiaba una lancha cargada de bidones de combustible frente a la costa de Málaga, con otros tres hombres a bordo. Cuando Vigilancia Aduanera le dio el alto, el arousano emprendió la huida. Un golpe de mar frenó en seco su planeadora y la de Aduanas le embistió por atrás. El accidente le costó la vida a uno de los tripulantes de la supuesta “narcolancha”.

Ese episodio es precisamente uno de los puntos de partida de la operación de ayer. El misterioso incendio de una planeadora, ocurrido a mediados de enero pasado cuando estaba fondeada frente a un astillero de Moaña, fue otro capítulo relevante de la presente investigación.

Además de las cuatro embarcaciones rápidas, los agentes hallaron en los registros dinero en metálico, coches y moldes para la fabricación de más lanchas. En la provincia de Pontevedra han sido detenidas trece personas, según fuentes oficiales, si bien la cifra total de arrestados en el conjunto del operativo podría rondar la veintena. Las intervenciones policiales se han producido en ocho viviendas y tres naves industriales repartidas por los municipios de Cambados, Vilanova, A Illa, O Grove, Ponteareas, Barro, A Lama, Caldas de Reis y Moaña. También se han llevado a cabo tres entradas en el norte de Portugal, a cargo de la Policia Judiciária lusa.

Los investigadores atribuyen a los miembros de la presunta organización un delito de contrabando por la fabricación de las lanchas; otro contra la salud pública, pues estarían relacionados (al menos, algunos de ellos), con un alijo de dos toneladas de hachís en el sur; y un tercero de pertenencia a organización criminal.

Está previsto que los detenidos pasen a disposición judicial esta semana.

La comarca de O Salnés amaneció ayer con un importante despliegue de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. A Illa fue una de las paradas de los investigadores, y allí entraron en casa de José Antonio F. O., un isleño ya conocido por las fuerzas de seguridad y que en 2009 iba con Otero Magdalena en una planeadora que se internó en aguas de Gibraltar escapando de una patrullera de la Guardia Civil.

Otra de las paradas del dispositivo fue el polígono industrial de Tremoedo, en Vilanova, donde hay una nave en la que podrían estar fabricándose lanchas para el alijo de cargamentos de hachís. Fuera de O Salnés, eran las ocho de la mañana cuando los guardias accedieron a un astillero de Moaña y tomaron declaración a las personas que estaban en enero pasado, cuando se incendió una planeadora frente a las instalaciones de la empresa.

Este es el segundo operativo conjunto a gran escala contra el tráfico de drogas que se produce en O Salnés durante el mes de marzo, tras la redada contra una presunta organización dedicada a la fabricación de lanchas rápidas para el alijo de la droga. En aquella ocasión resultaron detenidas 22 personas, de las cuales ocho ingresaron en prisión.