La Xunta ha mostrado su rechazo a la propuesta del Gobierno de repartir los fondos destinados a indemnizar los daños causados por el lobo al asegurar que, con los criterios sugeridos, no se ponderaría de una forma justa el peso y presencia de esta especia en cada territorio. Esta fue la postura defendida ayer por la directora xeral de Patrimonio Natural de la Xunta, Belén do Campo, ante la directora general de Biodiversidad, Bosques y Desertización del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, María Jesús Rodríguez, que ha convocado a una reunión por videoconferencia a los representantes de Galicia, Asturias, Cantabria y Castilla y León para hablar sobre la gestión de las ayudas del lobo y emplazarlos a remitir sus propuestas al respeto antes del próximo 21 de abril.

Do Campo justificó su rechazo a la propuesta estatal señalado que estas cuatro comunidades concentran el 95% de los ejemplares de lobo ibérico de todo el país. Por eso, incidió en que “carece de sentido” que el Gobierno central proponga un reparto de los fondos destinados a prevenir posibles ataques en el sector agroganadero sin tener en cuenta todo el peso de la presencia real de estos animales en los distintos puntos del país.

La Xunta también expresó su disconformidad con que, “casi siete meses” después del anuncio de veinte millones de euros para paliar los daños, las comunidades permanezcan “a la espera” de este reparto.