“Galicia tiene un mapa político-administrativo del siglo XIX” y, pese a que su sociedad se halla inmersa en la era de la globalización o de internet, “ nada se movió”. Así aludía ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a que la “apuesta en serio” por la fusión de concellos iniciada en 2013 desde la Administración gallega “no caducó”. “No caducó la apuesta por la fusión, por la racionalización del territorio, su ordenación, y la garantía y estabilidad de los servicios públicos”, defendió tras el Consello de la Xunta, para defender un nuevo impulso a las fusiones.

La mengua demográfica, el hecho de que los concellos pequeños tengan una “enorme dificultad” para llegar a fin de mes y cumplir sus competencias y la necesidad de “blindar los servicios básicos en toda Galicia”, alegó, provoca que la Xunta quiera darle “una vuelta” al tema y, a través de un convenio con la Fundación Juana de Vega, analizar distintas posibilidades de agrupaciones o fusiones de concellos para el futuro y sugerir “modelos de racionalización de la planta municipal”. Ese análisis “técnico”, recalcó Feijóo, se presentará en “próximos meses” e incluirá una encuesta. “Qué opinan los gallegos sobre la fusión en aquellos lugares en los que, desde el punto de vista social, económico y administrativo sea razonable” ese planteamiento, alegó.

Es uno de los acuerdos de ayer del Consello de la Xunta, donde también detalló que el Plan de Infraestruturas Sanitarias de Atención Primaria, que avanzaba el jueves en Vigo, contempla la puesta en marcha de 37 nuevos centros de salud y la ampliación y reforma de otros 14. Indicó que las 51 actuaciones afectan a uno de cada cuatro ciudadanos gallegos. Feijóo explicó que esta planificación sigue criterios técnicos y asistenciales como: la antigüedad de los centros, su estado de conservación o las carencias funcionales y operativas.

En la reunión semanal del Ejecutivo gallego también se analizó un informe de la Consellería do Medio Rural que hace balance del convenio firmado en 2018 por Xunta, Fegamp y Seaga para la protección de núcleos habitados contra el fuego mediante la limpieza de maleza de las fajas secundarias, las más próximas a viviendas. Según Feijóo, “no es un mal resultado”, dado que dos de cada tres hectáreas de la superficie de los concellos adheridos al convenio (270) de defensa de las aldeas está ya gestionada, casi 300.000 hectáreas.

Asimismo, el Consello de la Xunta ha acordado que Sanidade y Augas de Galicia colaboren en el control de la calidad de las aguas de 200 sistemas de abastecimiento autónomo de seis municipios: Oia, Mondariz, Cerdedo-Cotobade, Baleira, Oímbra y San Xoán de Río.

Otro acuerdo del Ejecutivo gallego incluye 37 millones de euros para promover las energías renovables, el autoconsumo y el almacenamiento energético. 19,8 fueron activados la pasada semana para proyectos dirigidos a empresas y se sumarán otros 11,5 millones para una convocatoria destinada a particulares, autónomos, entidades sin ánimo de lucro y administraciones.

Además, Feijóo anunció que Galicia contará con una inversión de unos 20 millones de euros en el polo de tecnologías cuánticas, en biotecnología aplicada a la salud y en ciencias marinas o que la Administración colabora para comercializar 1.500 plazas en balnearios para “paliar” el impacto en el sector de no contar con el programa del Imserso.