La Policía Autonómica de Santiago ha detenido a un joven de 21 años como presunto autor de un incendio intencionado que se registró el pasado 9 de octubre en A Pobra do Caramiñal y que calcinó 900 metros cuadrados de superficie arbolada.
A través de un comunicado, la Xunta informa del esclarecimiento de este fuego que afectó a la parroquia de Posmarcos y en cuya investigación participaron la Policía Nacional de Ribeira, la Guardia Civil de Boiro, agentes medioambientales de la Unidad de Investigación de Incendios Forestales (UIFO) y personal del distrito forestal IV Barbanza.
El detenido reconoció los hechos e incluso aportó a los agentes el mechero con el que supuestamente inició el incendio. En la indagación, destaca la Administración autonómica, fue "clave" la colaboración de un testigo que "vio huir de forma apresurada un vehículo" del lugar donde comenzó el fuego, tras lo cual dio aviso al teléfono de emergencias.
Esto permitió movilizar a los equipos de extinción y evitar que las llamas se propagasen y la superficie afectada alcanzase mayores dimensiones.
La investigación ha constatado que el fuego fue intencionado, tal y como se recoge en las diligencias de los hechos que fueron remitidas al Juzgado de Instrucción de guardia de Ribeira.
En lo que va de campaña contra incendios este año, 32 personas han sido investigadas por la Policía Autonómica como presuntas autoras de fuegos forestales.
