Quieren que la Xunta mantenga a los cerca de 2.300 docentes contratados este curso académico para atender los desdobles de grupos y el refuerzo desplegado en los centros educativos para garantizar las llamadas “medidas COVID”. Los sindicatos de profesorado reclaman de forma unánime al Gobierno gallego que los mantenga el próximo curso. Representantes de CC.OO Ensino, ANPE Galicia, FeSP UGT y CSIF manifiestan su “alta preocupación” ante la ausencia de un protocolo concreto de cara a la planificación del próximo curso y de la “falta de respuesta” de la Consellería de Cultura, Educación e Universidade.
Uno de los principales temores de estas organizaciones es la posibilidad de que la Xunta reduzca los cuadros de personal de este año y regrese a una situación anterior a la pandemia, justificándose en la nueva distancia de 1,2 metros entre alumnos –propuesta en la última reunión entre las comunidades y la ministra de Educación–.
El responsable de CCOO, José Fuentes, advirtió de que el próximo curso seguirá condicionado por la COVID-19 e insiste en la importancia de “garantizar una presencial segura en todos los centros educativos”. Para ello, “la única forma es con las mismas condiciones que este año”, ha señalado, evitando reducir la distancia de seguridad de 1,5 metros y manteniendo el número de contrataciones docentes y de personal de limpieza y cocina. Por su parte el presidente del sindicato independiente ANPE Galicia, Julio Díaz, justifica que estos recursos permitirían “mejorar la calidad educativa del sistema”, además de aliviar “la sobrecarga de trabajo y el sobreesfuerzo” experimentado por los trabajadores de los centros. También recordó que “existe financiación” para mantener este dispositivo y que el propio Ministerio de Educación “está promoviendo” que las comunidades los mantengan el próximo año, como ya confirmaron Navarra, Cantabria o Baleares.
Desde UGT, Felipe Balboa defendió que “la cantidad de sobresalientes” obtenidos entre el alumnado que se presenta a las pruebas ABAU de este año es un dato “significativo del rendimiento” alcanzado este curso. “Y en parte es consecuencias de los desdobles y de la reducción de ratio”, ha añadido.
Mientras, desde CSIF, José Carlos Fernández no recuerda un momento “más importante” para atender esta “reclamación histórica” y mantener la reducción de alumnos por aula, cuyos beneficios están avalados. Por su parte, la CIG-Ensino ha convocado una protesta hoy ante la sede de la Xunta de Santiago para denunciar esta situación.
Tras una reunión telemática entre los responsables autonómicos de Sanidad y Educación y los ministros Miquel Iceta, Carolina Darias e Isabel Celaá el pasado mes de mayo, el Ministerio de Educación se comprometió a aportar la misma cantidad de fondos que este curso –procedentes de la UE–, pero serán las comunidades autónomas, dentro de sus competencias, las que decidan en última instancia si mantienen, y en qué grado, las plantillas de refuerzo.
