Ana Pontón aprovecha la última ofensiva del presidente de la Xunta y líder del PP contra su formación, el BNG, para polarizar la escena política y orillar al PSdeG. La portavoz nacional del Bloque reclamó ayer por carta a Alberto Núñez Feijóo una cumbre bilateral para “sumar esfuerzos para salir de esta durísima crisis”, causada por la pandemia de COVID-19. Esta propuesta se produjo una hora antes de que el líder de los socialistas, Gonzalo Caballero, también reclamase una reunión sobre la coyuntura económica y social, aunque con las otras dos fuerzas de la Cámara: el PP, que tiene mayoría absoluta, y el BNG. El 8 de febrero ambos ya habían solicitado encuentros similares.

La diferencia estriba ahora en que Pontón ha plasmado por escrito su propuesta de cumbre a dos, enviando su misiva una semana después de que Feijóo elevase el tono contra ella en el Parlamento. “El BNG más radical y lamentable de la historia de Galicia es el que usted encabeza: nunca ningún portavoz del BNG hizo lo que usted hace o, por lo menos, consiente”, espetó en alusión a su críticas contra el “régimen del 78” y sus alianzas con Bildu o ERC.

La estrategia de Feijóo no se limitó a la Xunta, de la que ejerce como máximo responsable, sino que se extendió a su partido. Días después, Pontón reaccionó tratando de reafirmar su perfil más presidenciable y erigiéndose como antagonista del titular del Ejecutivo, dejando a un lado al PSdeG, con el que gobierna en tres diputaciones y numerosos concellos. En las autonómicas de julio, el BNG se situó como segunda fuerza parlamentaria, con 19 actas, por 14 socialistas y 42 del PPdeG. Pide esa cumbre en calidad de “portavoz nacional del principal partido de la oposición”.

“No es momento de confrontación inútil, ni de partidismos sino de altura de miras para poner los intereses del país y de su gente por encima de todo”, argumenta Pontón en su carta, en la que propone cuatro cuestiones clave para alanzar unos “consensos” que “son siempre necesarios, pero más que nunca en un momento de crisis sin precedentes en tiempos de paz”. “Para el BNG, el adversario es el virus, el paro, el cierre de empresas y negocios. La crisis sanitaria y económica son los adversarios”, sostiene.

Como cuestiones a tratar cita el refuerzo de la sanidad pública y un plan de vacunación de 24 horas al día, defensa de los intereses de Galicia en la captación de los fondos europeos de reactivación, un plan de rescate para los sectores “más afectados por la pandemia” y un “nuevo modelo de cuidados que garantice una vejez digna”.

Los socialistas lanzaron un mensaje similar pocos minutos después, pero, en su caso, sin exclusiones. Caballero instó también a Feijóo a una cumbre para sellar un “gran acuerdo de país” en torno a la reconstrucción tras la crisis y censuró la falta de una “estrategia en Galicia para los fondos europeos a inicios de marzo”.

“Mucha gente está asustada, el escenario económico es muy complejo y el Gobierno de España está dando fondos para hacer resistir la economía con impulso del gasto público, pero es necesario concretar un plan de recuperación que no nos haga perder las posibilidades”, alertó.

Desde el PSdeG matizan que es momento de “un gran acuerdo de país” y no de “buscar protagonismo” al preguntarles sobre la propuesta de Pontón.

Por su parte, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, tiró de ironía para recordarle a Pontón que esta alegaba la pasada legislatura, cuando el BNG fue cuarta fuerza, que no existía la figura de líder de la oposición en la Cámara gallega.