Si la denuncia de "saturación" de atención primaria fue una de las mechas que prendió el conflicto en el nivel asistencial, el sindicato CESM denuncia ya "la sobrecarga de trabajo que sufrirán" los facultativos de atención primaria por las vacaciones estivales "por la falta de previsión y planificación de la Consellería de Sanidade". Su secretario xeral, Antonio Otero, cifra esta sobrecarga "en al menos el 30%".

La Consellería de Sanidade admite la "imposibilidad de cubrir todas las ausencias estivales" y afirma que, en esta situación, "se opta por la prolongación de jornadas" de los facultativos o por la intersustitución, es decir, son compañeros quienes atienden de forma provisional el cupo de consultas que le tocarían al personal ausente.

El secretario xeral de CESM es crítico con esta solución y augura que la situación "acabará por reventar". Alega que se dan en los facultativos situaciones de "estrés" y "ansiedad", que "se agrava" en zonas turísticas, donde estos médicos "pueden llegar a atender a 70 pacientes en un día", sin contar no programados. La situación, reprochan, "se repite verano tras verano".

Sanidade incide en que en verano "se garantiza la asistencia sanitaria" a la vez que se permite a los trabajadores disfrutar de su derecho al descanso. Señalan que se aplicarán todas las medidas que permitan una cobertura de las ausencias con personal de las listas de contratación contratando al personal "disponible" y con "refuerzos" en zonas de afluencia turística y no solo a centros de salud, sino también de urgencias.