Una estrategia ibérica contra la despoblación. Este fue el acuerdo más importante de la cumbre de ayer en Valladolid. Los Gobiernos de Pedro Sánchez y António Costa sentaron ayer las bases para buscar soluciones conjuntas a un problema común: la desertización y el envejecimiento. Buscaran proyectos para desarrollar de forma coordinada en las regiones transfronterizas.

Sánchez es partidario de dar un enfoque positivo al problema de la despoblación, al preferi hablar de "repoblar" zonas que han perdido un buen número de habitantes en los últimos tiempos, especialmente en las zonas rurales.

Para Costa, la creación de un grupo de trabajo que desarrolle esta estrategia en los próximos meses es un "paso hacia adelante" en la consecución de unos resultados que frenen la sangría poblacional y ayude a las regiones transfronterizas a mejorar su situación socioeconómica.

El presidente del Gobierno también expresó su "entusiasmo ferviente" por la idea de formar una candidatura con Portugal y Marruecos que acoja el Mundial de Fútbol de 2030, mientras que su homólogo portugués, António Costa, lo ve como una "buena idea" que necesita ser trabajada.

Sánchez defendió el poder "transformador y esperanzador" de un proyecto que lanzaría, especialmente a los jóvenes, un "mensaje transversal" frente a "discursos de polarización" que actualmente marcan la agenda mundial.