La condonación a Valencia de 350 millones gastados en la remodelación del puerto para acoger las pruebas de la Copa América de vela y las carreras de Fórmula 1, y la inmediata demanda de A Coruña para que se perdonen 300 millones del puerto de Langosteira, una obra faraónica que la propia UE ha considerado "injustificada" por su nula rentabilidad, ha encedido las alarmas en el sur de Galicia.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Enrique López Veiga, y los empresarios de Pontevedra piden también compensaciones para el puerto de Vigo. El alcalde de la ciudad, Abel Caballero, advierte: "Los esfuerzos se tienen que centrar en el puerto de Vigo, que es el que tira de la economía gallega. Tiene que recibir más fondos que los demás porque mueve la economía gallega".
El presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Enrique López Veiga, entiende que el primer puerto de la comunidad no se puede quedar atrás. "El puerto de Vigo necesita acelerar su modernización" para elevar su competitividad y plantea que se le resarza si al puerto de A Coruña se le condona la deuda de 300 millones, una vez que el Gobierno central también acaba de asumir 350 millones de la remodelación de los muelles de Valencia.
López Veiga solicita fondos para la conexión ferroviaria directa por Valladares del recinto Ro-Ro para enlazarlo en Porriño con la línea de tren ya existente, quedando así unido con los principales centros logísticos de la comarca (PTL, As Gándaras y Plisan-Puerto Seco).
Las obras de la salida sur hacia Portugal y liberalizar la vía de mercancías y acomodar toda la infraestructura para asegurar la intermodalidad son otros proyectos para los que requiere fondos el puerto de Vigo.
López Veiga no está solo en sus demandas. Cuenta con el apoyo de los empresarios. La patronal de Pontevedra, el Círculo de Empresarios de Galicia y la Cámara de Comercio de Pontevedra piden igual trato. Si A Coruña alivia su carga financiera a cuenta de las arcas del Estado, los demás puertos gallegos también deben ser desagraviados, sostienen, aunque su situación económica no sea tan delicada.
El regidor de Vigo, Abel Caballero, defiende que el puerto de la ciudad es "el primero de Galicia, aquí está la carga general, la pesca, los contenedores. Cuando las inversiones tocan a otro puerto se habla de interés general, pero si tocan a Vigo, ¿entonces es localismo?".
El PSdeG
Por su parte, el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ve imposible que la Autoridad Portuaria de A Coruña se pueda librar de hacer frente al crédito de 200 millones de euros que le concedió Puertos del Estado. Tiene otro préstamo de 100 millones al Banco Europeo de Inversiones. "La UE no permite una condonación de deuda a un puerto. Sería competencia desleal para otros puertos", asevera Gonzalo Caballero. En el caso de Valencia, el Gobierno central hace suyo un crédito de un Consorcio, en el que no participa la Autoridad Portuaria, y sí el Estado, el Gobierno autonómico y el ayuntamiento. Esta sería la circunstancia que permite la condonación, y que no se da en el caso coruñés.
El líder de los socialistas gallegos sólo ve posible "estudiar nuevas condiciones para flexibilizar el crédito" en Langosteira. En todo caso, Caballero pone el acento en que la Autoridad Portuaria de A Coruña está gestionada por el PP y debe ser este partido quien ridna cuentas de cómo negoció los préstamos. "No existe analogía entre Valencia y A Coruña, y a partir de ahí todo lo que pueda beneficiar a los puertos gallegos, estaremos ahí", remarca el secretario xeral del PSOE gallego.
Tras saltar la noticia de que el Gobierno de Pedro Sánchez se hacía cargo del crédito de 350 millones para remodelar los muelles de Valencia, el Ayuntamiento de A Coruña exigió igual trato para Langosteira, una obra que fue adjudicada en 2005 por 370 millones de euros y cuyo coste definitivo fue de 789 millones, a los que habrá que sumar 132 millones para el enlace ferroviario. "No tiene sentido que el Ejecutivo central condone a Valencia una deuda de 350 millones y aquí no impulse una medida similar", aseguraron.
El Ejecutivo central marcó ayer diferencias entre Valencia y A Coruña. En el primer caso explica se le perdona la inversión no a la autoridad portuaria valenciana, si no a un consorcio. "Se financia una infraestructura", no se paga una deuda, explican desde la Delegación del Gobierno.
El Ejecutivo central, que necesita en las Cortes los votos de Compromís, socio del PSOE en el Gobierno valenciano, decidió asumir los 350 millones que el ConsorcioValencia 2007 debía al Instituto de Crédito Oficial.
El grupo municipal del PP coruñés no ve con malos ojos que se condone la deuda de la Autoridad Portuaria coruñesa. "Todos los gobiernos del Estado anteriores dijeron y mantuvieron que no se condonaría la deuda a ninguna administración portuaria pero este nuevo gobierno ha cambiado las reglas", manifiesta el PP coruñés, que anima a "hacer lo mismo con la Autoridad Portuaria de A Coruña".
