Los centros educativos acogerán a partir de la próxima semana las pruebas de diagnóstico, más conocidas como 'reválidas'. En concreto, serán todos los alumnos gallegos de 3º de Educación Primaria (en colegios públicos, privados y concertados) los que participarán en estos exámenes los días 23 y 24 de mayo.

Del mismo modo, los exámenes de 6º de Primaria y 4º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) están previstos para la semana siguiente, entre el martes 29 y el miércoles 30 de mayo, y solo afectarán a una muestra de 290 y 160 centros educativos, respectivamente.

Este es el cuarto año de aplicación de estas pruebas celebradas al amparo de la Ley Orgánica 8/2013 de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) y, como tal, es el cuarto curso que sindicatos y asociaciones de padres piden a las familias que no lleven a los niños a clase durante esos días para "boicotearlas" porque, según han manifestado, "no sirven para nada" y "discriminan" al alumnado. La Consellería de Educación define estos exámenes como un "procedimiento ordinario" que "ayuda a que el sistema educativo mejore". La Plataforma Galega en Defensa do Ensino Público (CIG-Ensino, Anpas Galegas y BNG, entre otras entidades) apunta que en el bloqueo del año pasado participó el 80% del alumnado. Desde Anpas Galegas, Fernando Lacaci mostró su "desacuerdo" con las pruebas: denotan una "desconfianza en la labor docente". Desde Confapa, Rogelio Carballo, llama a "un pacto educativo" y aconseja a los padres que tomen estas pruebas "con la mayor de las lasitudes".