La brecha entre Luís Villares, portavoz de En Marea, y Podemos se ensancha después de que el primero considerase la renuncia del diputado Juan Merlo por mentir en su currículo un ejemplo a seguir para su compañera, Paula Quinteiro, que se niega a dejar el cargo tras un altercado con la Policía Local de Santiago. "No entiendo las declaraciones de Luís [Villares]. Debéis preguntarle a él. Los gallegos tienen problemas más graves y estas cuestiones hay que gestionarlas donde hay que gestionarlas", replicó la líder de Podemos en Galicia y viceportavoz parlamentaria de En Marea, Carmen Santos.

El viernes pasado, el vigués Juan Merlo anunció su dimisión tanto al acta parlamentaria -ya registrada ante la Cámara, aunque la resolución se dilatará unos días- como a su condición de secretario de Organización en Podemos Galicia tras reconocer que no había concluido los estudios de ingeniería, pese a que sus biografías institucional y orgánica le otorgaban esa titulación.

Santos lamentó la "injusta" decisión de Merlo, cuyo falseamiento de currículo negó conocer previamente, y alabó su "honestidad" por dar un paso atrás y no "dañar la credibilidad" de Podemos ni dar "coartada" al PP para "tapar" el caso de Cristina Cifuentes, la presidenta de la comunidad de Madrid que obtuvo un máster sin cumplir los requisitos y que está bajo investigación de la Fiscalía. "Tenemos que demostrar que somos distintos", alegó.

Ese argumento es similar al de Villares para esgrimir el caso Merlo como elemento de presión sobre Quinteiro, que exhibió su carné de diputada ante la Policía Local durante el forcejeo de unos agentes con un miembro del que grupo con que se encontraba en Santiago que fue identificado por una queja vecinal por vandalismo. No existió denuncia por este hecho, pero Villares considera un "abuso de poder" blandir el documento parlamentario, en sintonía con el Consello das Mareas. Por contra, la mayoría del grupo parlamentario aboga por que mantenga el escaño y se inicie un expediente sobre el caso.

Villares reiteró esa línea en la R adio Galega y más tarde lo esgrimió como muestra de las diferencias "entre los dos modelos de ética: En Marea y el PP", recordando que la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, sigue en su puesto tras reconocer que también se atribuyó una licenciatura en Químicas de la que carece . "Merlo dio un alto ejemplo de ética en política y creo que tendrá que ser seguido por quien tiene que tomar decisiones", expuso sobre Quinteiro, añadiendo el caso de Xoán Hermida, que sería quien debería relevar a Merlo en el Parlamento, pero que anunció que no lo haría tras conocerse una discusión con la policía. "Marcan la línea ética de nuestra organización", dijo Villares, que no concretó ayer cuándo se activará la consulta a las bases para dirimir el futuro de si Quinteiro si no dimitía. "Santos se equivoca", afeó a la líder de Podemos, que rechaza esa maniobra, y recordó a Villares que el grupo parlamentario salió de unas primarias en que participaron más de 10.000 militantes y el Consello das Mareas, de la votación de unos 2.500.

Por su parte, la dirección de Podemos alegó, como el propio Merlo, que el caso Quinteiro es diferente y que tiene "derecho a defenderse" internamente. Su líder en Galicia evidenció el malestar con Villares no tanto al asegurar "no entender" la comparación, como al evitar responder "sí" a la pregunta de la prensa de si su organización sentía cómoda con Villares como portavoz de En Marea. "No me toca dar declaraciones de este tipo", dijo.

Además, aseguró que Podemos "seguirá contando" con Merlo, sin aclarar en qué situación -militante de base o como trabajador del partido-, y aplazó el nombramiento de su relevo hasta reunirse con su dirección. Eso sí, desvinculó la baja de un problema para la preparación de las municipales y las negociaciones con las mareas, con las que quiere coaligarse sin diluir su marca. Negó "presiones" de la cúpula estatal para forzar su renuncia y diferenció su caso del de Cifuentes y otros miembros del PP, que "exhiben títulos a golpe de talonario" y cuya obtención estuvo trufada de "fraude y delitos".