También en el sistema público de salud gallego quien espera, desespera, aunque con matices importantes. Los introduce el depende -tal y como se esperaría desde el cliché idiosincrático- sobre el por qué y para qué se aguarda. La lista de espera para someterse una intervención de prótesis de cadera es la tercera más numerosa de España. Sin embargo, quienes precisan una operación de varices son los que menos días tardan en ser intervenidos a nivel estatal.
Según datos publicados por el Ministerio de Sanidad -que en algunas variables no incluye información de Cataluña y la Comunidad Valenciana-, el panorama al que se enfrentan los usuarios de la medicina pública gallega, respecto del que experimentarían de vivir en otros territorios del Estado, varía bastante si lo que se analiza comparativamente son los pacientes que conforman la lista de espera o si lo que se observa es el número de días que transcurren antes de recibir atención. El diagnóstico también sufre alteraciones clave si quien aguarda lo hace para acudir a una consulta con un especialista o si el turno es para una intervención quirúrgica que no es considerada de urgencia.
En todo caso, el cruce de los distintos indicadores dibuja contrastes profundos entre las distintas comunidades autónomas e, incluso, al interior de sus propios sistemas de salud. En términos globales, Galicia se sitúa en los puestos de cabeza en cuanto a los tiempos de espera más cortos para entrar a quirófano. Los 62 días de media, la ubican como la quinta autonomía con menos dilación en las operaciones quirúrgicas en un ránking que, a nivel estatal, cierra Canarias con listas que someten a los pacientes a esperas de hasta 162 jornadas.
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En este tipo de procesos médicos, nuestra comunidad incluso alcanza resultados de podio en las intervenciones oftamológicas y en las cirugías vasculares y pediátricas. En dichos casos, los gallegos esperan pero menos que el resto de la población española. Sin embargo, Galicia es la tercera comunidad con mayor porcentaje de pacientes -1.449 en total- que tienen que aguardar más de seis meses para ser sometidas a operaciones ginecológicas.
En lo que se refiere a las demoras que se deben soportar apara acceder a una consulta o realizar una prueba con médicos especialistas, los 35 días de espera media posicionan a Galicia como la sexta autonomía con los plazos más cortos.
Estos disminuyen, además, si el motivo de la cita remite a cuestiones de traumatología, dermatología o cardiología -entre otras-,aunque no para quienes sufran patologías propias del oído, la nariz y laringe, casos en los que tendrán que tener más paciencia para conseguir una cita. Si la espera supera los sesenta días son nuevamente las pacientes de ginecología las que se ven obligadas a aguantar más hasta lograr ser atendidas en los hospitales del país.
En el resto de variables, los datos de la sanidad gallega tienden a la discreción, con resultados de media tabla en relación al conjunto del sistema nacional de salud.
Evolución de los últimos años
La estadística contenida en el documento difundido por Sanidad, con información correspondiente al 30 de junio de 2016, no diverge significativamente de los datos referidos a 2015. En la mayor parte de los casos, el progreso en un indicador de la sanidad gallega se compensa con el emporamiento en otro.
En medio de la maraña de cuadros, filas y columnas, destaca la mejoría en el tiempo medio de espera referente a consultas especializadas, en la que se pasa de los 51 días de 2015 a los 35 del pasado año. Sin embargo, aumentan las jornadas que hay que aguardar para pasar a quirófano, ya que antes eran 42 y ahora son 20 más.
Si forzamos un poco más la mirada y ojeamos por el retrovisor los retrasos a los que se enfrentaba quien acudía a salud pública gallega cuatro años atrás, cuando iniciaba la anterior legislatura, la situación tampoco difiere demasiado.
En 2012, por ejemplo, Galicia era la sexta comunidad con menor tiempo de espera quirúgica y ahora se encuentra un escalón mejor. Sin embargo, hace cuatro calendarios, era la autonomía con la quinta tasa más baja de pacientes esperando para una operación y en la actualidad ya solo es la sexta. Como actualmente, las diferencias de demora se derivaban de los motivos que empujaban a un paciente a cruzar el umbral de un centro sanitario.
La Consellería de Sanidade tiene previsto aprobar "en semanas" un decreto que desarolle la Lei de Garantías de Prestacións Sanitarias y fije a qué patalogías concretas se aplican los tiempos de espera señalados genéricamente en la norma de 2013 para operaciones y consultas.
