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H.S.

Estrechan el control sobre los embalses para el cobro del IBI

Concellos y Hacienda agilizan el proceso para rastrear las presas y detectar mejoras y ampliaciones

Los ayuntamientos, hijos pobres de la administración pública antaño, son hoy el ejemplo que Hacienda pone día sí y día también en la lucha contra el déficit. La excepción. Llevan cuatro ejercicios consecutivos cumpliendo el objetivo marcado, gracias, sobre todo, a la subida que el Gobierno central auspició en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), su principal fuente de ingresos. Los municipios pudieron así exprimir el gravamen con alzas de tipos en propiedades urbanas, rústicas y también en los conocidos como Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICE). Puertos comerciales, aeropuertos, centrales de electricidad o carreteras de peaje pagan también la contribución a las localidades en las que se ubican. ¿Cuánto? Entre un 0,4% y un 1,3% de su valor. A los BICE se agarraron con fuerza las entidades locales españolas en este periodo de crisis para mejorar su recaudación y en el caso de Galicia, donde había un centenar de concellos que ni siquiera tenían fijado el tipo a aplicar, ya no queda ninguno que no lo haga. Por esa misma razón aquellos que cuentan con embalses en su territorio rastrean a fondo su estado por si existe alguna o parte de las instalaciones de otras sin dar de alta. Un complicado proceso que el Catastro quiere agilizar.

El organismo controlado por el Ministerio de Hacienda y la Federación Nacional de Asociaciones y Municipios con Centrales Hidroeléctricas y Embalses (Femembalses) firmaron ya en 2014 un acuerdo para intercambiar información. "En numerosas ocasiones, por la antigüedad de las presas, embalses y saltos de agua, las Gerencias del Catastro no disponen de los planos completos de los proyectos correspondientes que definan las características físicas y dimensiones de todas sus instalaciones", explica en la circular que acaba de lanzar para avanzar en el rastreo. Eso es fundamental para tasar las centrales y reclamar luego el IBI. "Además -continúa-, dadas las características constructivas de estos inmuebles, en los que muchos de los elementos son total o parcialmente subterráneos, resultan relativamente frecuentes las omisiones de elementos o de unidades de valoración". ¿Consecuencia? "La descripción catastral de los inmuebles afectados no refleja completamente sus características físicas", sostiene la Dirección General del Catastro, que recuerda que hay que tener en cuenta también la construcción de los nuevos y ampliación de otros, junto con "nuevos elementos o conexiones" entre los que existen y las reformas. De lo contrario, los ayuntamientos cobrarán de menos.

En un documento con diez instrucciones, el Catastro "aclara" los pasos a dar para "incorporar mejoras" en el convenio firmado con Femembalses "con el fin de agilizar los plazos de tramitación así como garantizar la exactitud de los datos catastrales". "Es que no es un trabajo que se haga de un momento a otro", confirma Jesús Otero, alcalde del municipio pontevedrés de Vila de Cruces y vocal en la Federación.

Las revisiones de los centrales son "ilimitadas", como recuerdan en Femembalses y, por ejemplo, Vila de Cruces está en estos momentos con un nuevo examen de sus cuatro embalses después del cribado realizado hace cuatro años. La meta de los municipios afectados en este 2016 es acabar con esas "omisiones" y contar con un mapa completo de las presas para ajustar la recaudación.

A pesar de que los ingresos por los BICE están a años luz de lo que reporta el IBI urbano a los concellos de Galicia, no es una cuestión menor. Hay 167 embalses en 94 localidades detectados en los registros públicos del Catastro. En no pocos casos se trata además de centrales con más de una turbina o sistema de bombeo, por lo que el valor es mayor aunque se cuente como una única unidad catastral. Femembalses calcula que el valor a efectos del cobro del IBI de este tipo de instalaciones en España roza los 6.200 millones, de los que cerca de 460 millones son de presas ubicadas en la comunidad.

La recaudación de los BICE supera ya los 31 millones de euros

  • No hay mejor ejemplo de la complejidad en la identificación de los bienes inmuebles de características especiales que la lentitud con la que van incorporándose a la base de datos del Catastro. Otra muestra: del casi centenar de concellos con embalses en Galicia, en solo seis de ellos consta el valor individualizado. Pero los BICE son una fuente de ingresos importante para las entidades locales. Cada vez más con las subidas en los tipos y el rastreo de los que están ocultos o modificados. En 2015, la recaudación alcanzó en la región los 31,3 millones de euros tras un ascenso en comparación con 2014 de casi el 4%. Galicia es la sexta comunidad con mayores ingresos vinculados a los BICE, que en el conjunto del Estado, según las estadísticas del Catastro, alcanzaron los 481,7 millones de euros, un 0,8% por encima del ejercicio anterior. A la cabeza está As Pontes, con 4,7 millones; seguida de Vigo, con 2,4 millones; y A Coruña, con 2,3.

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