Aproximadamente medio millar de trabajadores eventuales del Servizo Galego de Saúde (Sergas) se han dado cita este miércoles en la capital gallega para denunciar la "precariedad total" que sufren y reclamar "estabilidad laboral".

La protesta arrancó de la Praza do Obradoiro con numerosas pancartas y llegó hasta la sede central de la Xunta, en San Caetano, entre cánticos advirtiendo de que los contratados no son "esclavos" y exigiendo la atención del presidente gallega, Alberto Núñez Feijóo.

En declaraciones a los medios, la portavoz del Sindicato de Sanitarios Galegos Públicos (Sagap), Eli Dosil, ha demandado, entre otras medidas, que se convoque una oferta de empleo público que incorpore "todas las plazas que fueron desapareciendo desde 2009" y que cifrado en unas 3.000.

Esta y otras peticiones la han hecho llegar los convocantes de la manifestación al conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, a través de una carta depositada en el registro de la Administración autonómica al término de la protesta, tras la lectura del manifiesto.