Ningún alumno gallego queda sin escolarizar, pero en ocasiones la demanda se concentra en un determinado número de colegios que se ven obligados a restringir la entrada aplicando un baremo de admisión. Es el caso de alrededor de un 20 por ciento de los centros escolares.
En estos colegios el acceso se regulará a través del nuevo decreto de admisión de alumnos que el pasado jueves aprobó el Consello de la Xunta. Criterios como que el niño que solicita plaza tenga hermanos estudiando en el mismo colegio o la cercanía al domicilio laboral o familiar pesarán a la hora de conseguir matrícula en un determinado centro.
Aunque en años anteriores había un 20 por ciento de colegios donde la demanda de matrículas era superior a la oferta, la conselleira de Educación, Laura Sánchez Piñón, aclaró que el próximo curso puede haber alguna "sorpresa". "Podemos tener mucha demanda en escuelas donde antes no la teníamos porque estamos mejorando algunos servicios como el de comedor escolar", aseguró.
El proceso para reservar plaza en los colegios se abre el próximo lunes. Desde este día y hasta el 30 de marzo los padres de aquellos niños que se vean obligados a cambiar de centro por que pasan de un nivel educativo a otro tendrán que reservar matrícula. Están en esta situación, por ejemplo, los alumnos que acaban Primaria en un colegio y tienen que cambiarse al instituto de Secundaria que les corresponde. Según la Consellería de Educación, este proceso afectará a unas 28.000 familias y a unos 42.000 estudiantes.
Una vez finalizada la reserva de plaza, empezará la segunda fase: la presentación de solicitudes para matricularse, entre el 10 de abril y el 30 de abril.
Durante este periodo tendrán que presentar solicitudes tanto los padres de los niños que cambien de nivel educativo y de centro como aquellas familias que escolaricen por primera vez a sus hijos o que los quieran trasladar de un colegio a otro.
El último trámite será el de la matrícula propiamente dicha. Los alumnos que hayan sido admitidos tendrán de plazo para matricularse entre el 20 y el 30 de junio si son de Infantil y Primaria y entre el 25 de junio y el 10 de julio si son estudiantes de Secundaria y Bachillerato.
Únicamente en el caso de los colegios donde la demanda de plazas es superior a la oferta, los padres tendrán que entregar en el centro la documentación que acredite que cumple los criterios por los que han sido admitidos.
"Este proceso de matriculación es más sencillo y más garantista porque se reserva un 15 por ciento de las plazas para niños con necesidades especiales", aseguró ayer Sánchez Piñón.
