Las largas travesías en barco o en ferrocarril formaron parte de la vida de muchos gallegos que, movidos por el deterioro de la economía agrícola y la caída del sector industrial, decidieron realizar eternos viajes en busca de una vida mejor.

En muchos de los países de acogida han ido surgiendo Casas o Centros Gallegos en los que los emigrantes podían reunirse para rememorar ,con “morriña”, su amada tierra y encontrarse con otros paisanos en en su misma condición, con los que relacionarse y así, sentirse más cerca de Galicia.

La Gran Manzana

La ciudad de los rascacielos acoge la Casa de Galicia que sigue manteniendo a día de hoy el compromiso por el que fue creada en 1940 y este, no es otro, que la divulgación de la identidad, tradiciones y la cultura gallegas. Para la festividad del Día de Galicia realizan algunas actividades, “como ha sido tradición a lo largo de nuestros 76 años de historia organizamos una Gran Sardiñada en honor a Santiago Apóstol”, comenta Marcos Roel, presidente de Casa Galicia de Nueva York.

“A pesar de que una gran mayoría de los afiliados a la Casa Galicia están de vacaciones, a este evento asisten alrededor de 400 personas”, concluye el presidente. Este acto supone la clausura del centro hasta después de verano.

El país del tango

Galicia también cuenta con una representación en Argentina donde se encuentra el Centro Gallego de Buenos Aires. Este, está cerca de cumplir los 107 años de vida, en los que han pasado figuras de la talla de Camilo José Cela o Ramón Otero Pedrayo.

La institución cuenta con infinidad de servicios como un sanatorio social o la revista “Galicia” que es el órgano de difusión del Centro. En la semana grande de Galicia, del día 25 al 29, se han organizado diversas actividades como una ofrenda floral ante los bustos de Rosalía de Castro y A.R Castelao, un espectáculo de folklore gallego o una queimada, entre otras.

México DF

Corría el año 1911 cuando, al otro lado del Océano Atlántico, un grupo de emigrantes gallegos decidió crear una agrupación coral para recordar a su tierra natal bajo el nombre “Orfeón Gallego en México” que posteriormente pasaría a ser el Centro Gallego de México cuya sede se establece en una casona de estilo francés de la capital.

Los afiliados al Centro pueden practicar diversas actividades, “el Centro cuenta con dos instalaciones diferenciadas donde se realizan ensayos de baile regional gallego, clases de gaita, torneos de billar, fútbol o dominó” comenta José Manuel Rey, miembro de la Comisión de Jóvenes del Centro. “Entre los socios y sus familias hay mucha gente joven y también muchos niños que participan en las distintas actividades que aquí se organizan”, explica.

Además, allí se edita la revista Anduriña que incluye la actualidad gallega. “Crear un legado vivo que se transmita a nuevas generaciones es una de nuestras principales misiones” comenta orgulloso José Manuel Rey.

Para celebrar el día de Galicia, el Centro invita a una comida conjunta de todos los afiliados y, como colofón, visualizar la Quema de la Catedral de Santiago de Compostela.