Subidas de impuestos para contribuyentes con rentas o patrimonios más elevados y rebajas para rentas del trabajo y autónomos. El plan de medidas fiscales pactado entre los dos socios de Gobierno –PSOE y Unidas Podemos– incluye decisiones de cal y de arena que, en conjunto, supondrán una mayor recaudación de 3.144 millones de euros en dos años (2023 y 2024), según anunció ayer la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

La decisión de Hacienda de rebajar el IRPF a rentas menores de 21.000 euros beneficiará al 60% de los contribuyentes gallegos, una cifra que podría alcanzar las 825.000 personas. Por su parte, las rentas de capital superiores a 200.000 euros pagarán más IRPF: en Galicia son 3.000 los contribuyentes afectados.

“El conjunto de nuestras medidas no es caprichoso, sino que responde a la necesidad de un reparto justo de las cargas”, dijo la ministra Montero durante la rueda de prensa de presentación del plan. La mayor parte de las medidas se incluirán en el proyecto de ley de Presupuestos del Estado de 2023

El nuevo gravamen sobre grandes fortunas afectará a 23.000 contribuyentes en todo el Estado y permitirá una recaudación adicional de 1.500 millones, según las estimaciones de Hacienda. El impuesto, que deberá tramitarse a través de un proyecto de ley, será temporal, para 2023 y 2024. Para un patrimonio neto entre 3 y 5 millones, se aplicará un tipo fiscal del 1,7%. Entre 5 y 10 millones de patrimonio neto se aplicará un tipo del 2,1%; a partir de 10 millones, será aplicable el 3,5%.

Más allá de la tarifa, el nuevo impuesto sobre las grandes fortunas se regirá por las reglas del actual impuesto sobre patrimonio para su determinación. Así, por ejemplo, el nuevo tributo conserva la exención de la vivienda habitual hasta 300.000 euros que existe en el de patrimonio o las reglas que se aplican para empresas familiares.

Armonización

Del nuevo impuesto sobre grandes fortunas serán deducibles las cantidades abonadas por el actual impuesto sobre el patrimonio que se paga en las comunidades autónomas. Por ello, en la práctica, supone una armonización para una tributación mínima en el impuesto sobre patrimonio: en comunidades como Cataluña, el futuro tributo no tendrá ningún efecto adicional sobre sus contribuyentes, pues el impuesto autonómico sobre el patrimonio ya es más gravoso que el nuevo; en comunidades como Madrid y Andalucía, donde el impuesto sobre patrimonio está bonificado al 100%, pasarán a tributar, al menos en 2023 y 2024, los patrimonios a partir de tres millones de euros. Además, si Madrid y Andalucía conservan la bonificación al 100% todo lo que se recaude por el nuevo tributo irá a las arcas del Estado y no se quedará en la comunidad autónoma. Lo mismo sucederá con el 50% recién bonificado en Galicia.

Además, los contribuyentes con rentas de capital más altas tributarán en el IRPF a un tipo mayor (a partir de 200.000 euros el tipo pasará del 26% al 27%; y a partir de 300.000 euros, del 26% al 28%). Se estima que esta medida afectará a unos 17.814 contribuyentes y permitirá una mayor recaudación de 204 millones.

Entre las medidas se incluye ampliar a salarios de hasta 21.000 euros la actual reducción general por rentas del trabajo del IRPF que en la actualidad se aplica a sueldos de hasta 18.000 euros. No solo habrá más beneficiarios, sino que la ayuda fiscal será mayor. Hacienda estima que esta medida permitirá extender la deducción a la mitad de los asalariados a partir de 2023 y que tendrá un impacto recaudatorio de 1.881 millones.

Una consecuencia de la ampliación de la reducción por rendimientos del trabajo es que el mínimo de tributación para un contribuyente soltero y sin hijos pasará de 14.000 a 15.000 euros. En el caso de un asalariado con dos hijos y declaración conjunta, el mínimo de tributación pasará, en la práctica, de 18.000 a 19.000 euros. Para los autónomos, se amplia en cinco puntos porcentuales la rebaja en el rendimiento de los módulos y se eleva del 5% al 7% la reducción por gastos de difícil justificación en la estimación directa.

Rebaja a 400.000 empresas

Hacienda estima un coste recaudatorio de unos 184 millones de euros para ambas medidas, que beneficiarán a más de un millón de trabajadores autónomos.

En el impuesto sobre sociedades, el plan de medidas incluye una rebaja del 25% al 23% del tipo impositivo para las empresas con una cifra de negocios inferior a un millón. Se estima que esta medida beneficiará a 407.384 empresas, con un impacto recaudatorio de 292 millones de ahorro para los contribuyentes.

Además, para los grupos de sociedades se limita al 50% la posibilidad de compensar en 2023 las pérdidas de filiales. Se estima que esta medida, de carácter temporal, afectará a 3.609 empresas, el 0,2% de los declarantes de sociedades, con un impacto recaudatorio de 2.439 millones de euros entre 2023 y 2024. Según aclaró la ministra Montero, esta medida no supone una subida fiscal sino un aplazamiento del beneficio fiscal que supone la compensación de pérdidas.

Además, el Gobierno también aprobará una rebaja del 10% al 4% el IVA de los productos de higiene femenina (compresas, tampones, protegeslips, preservativos y anticonceptivos no medicinales). Para esta medida se estima un impacto recaudatorio de 24 millones de euros.