La ampliación del permiso de paternidad sigue su andadura en el Congreso de los Diputados. La Mesa de la Diputación Permanente aceptó ayer tramitar el decreto ley de igualdad que amplía los permisos a ocho semanas a partir del próximo uno de abril, después de que los servicios jurídicos de la Cámara no hayan encontrada ninguna traba para hacerlo. El decreto prevé que los permisos se amplíen a doce semanas el año próximo y a dieciséis en 2021.

El informe de los letrados fue solicitado el miércoles por Ciudadanos al entender que la norma, que tiene que ser convalidado o tumbado por la Diputación Permanente, podría incurrir en inconstitucionalidad al modificar preceptos de la Ley Orgánica para la Igualdad. Este tipo de modificación no se puede hacer por decreto.

Sin embargo, los servicios jurídicos, como ya advirtieron el propio miércoles, han determinado que el decreto no corre riesgo de ser declarado inconstitucional, ya que no modifica aspectos de una ley orgánica sino contenidos de regulación ordinaria.

El vicepresidente primero del Congreso y diputado de Cs, el asturiano Ignacio Prendes, que fue el impulsor de la consulta a los letrados, se felicitó de la celeridad con la que se ha emitido el informe. Las dudas que tenía su grupo, reconoció Prendes, han quedado "despejadas", garantizando que la tramitación de la iniciativa continúe con "seguridad jurídica".

La reacción del PSOE, tras el informe jurídico, ha sido de notorio malestar. El secretario general del grupo parlamentario socialista, Rafael Simancas, denunció "las maniobras arteras y tramposas" de Cs, destinadas a "obstaculizar las iniciativas legislaturas del grupo socialista".

Simancas invitó a los naranjas a pedir disculpas a los españoles por haber sembrado "angustia y zozobra" en medidas como las equiparaciones de los permisos de paternidad y de maternidad, fundamentales en el decreto mencionado, o la ampliación de los contratos de alquiler de viviendas. "Ya está bien", se indignó Simancas, quien responsabilizó a Cs y al PP de haber promovido durante los últimos meses un filibusterismo parlamentario consistente en "vetos presupuestarios" y en la parálisis de la tramitación de proposiciones de ley del grupo socialista a través de las prórrogas de los plazos de enmiendas.

Ciudadanos mostró su descontento con la política del Gobierno, que no pasará a estar en funciones hasta el 28 de abril, de enviar decretos a las Cortes después de la disolución de las mismas, el pasado día 5, lo que hace que los tenga que convalidar o rechazar la Diputación. Su diputado Juan Carlos Girauta calificó estos decretos, aprobados en lo que los socialistas llaman "viernes sociales", de "electoralistas".

Por su parte, el PSOE mostró su confianza en que el polémico decreto sobre permisos de paternidad, así como los de alquileres, recuperación del subsidio para desempleados mayores de 52 años y el que prevé medidas ante el "Brexit" serán convalidados en la Diputación Permanente con apoyo mayoritario.