Al término de la reunión, el presidente de la Comisión Gestora, el senador José Ignacio Palacios, ha declarado en conferencia de prensa que hoy es "un día histórico" para Navarra y para el PP, un partido que desea constituirse en la Comunidad Foral "con humildad y vocación de permanencia".
Tras la ruptura del pacto de colaboración con UPN, ha afirmado, el PP llega a Navarra "para quedarse", ya que el proyecto que se quiere desarrollar "no tiene marcha atrás".
La reunión de hoy, ha explicado, ha sido una "primera toma de contacto" de las 34 personas que componen la Comisión Constituyente, para tratar algunos "temas domésticos", como la búsqueda de una sede en Pamplona o la preparación del primero congreso del PP de Navarra, para el que hay un plazo de seis meses, aunque se intentará celebrar cuanto antes.
Palacios, quien ha estado acompañado por el diputado Santiago Cervera, el senador José Cruz Pérez Lapazarán, el eurodiputado Javier Pomés y el ex integrante del Consejo Político de UPN Andrés Valencia, ha destacado que no tiene intención de devolver a UPN su acta de senador, como ha exigido la formación regionalista a los que fueron sus cargos públicos
El presidente de la Comisión Constituyente, quien ha informado de que el PP de Navarra cuenta ya con 402 afiliados, ha resaltado que él fue elegido senador bajo el programa del PP, que piensa seguir defendiendo en la Cámara Alta.
Tras subrayar que tanto él como el resto de integrantes de la Comisión Constituyente pertenecen a la "derecha templada" de Navarra, Palacios ha rechazado también que sean unos "tránsfugas", como se les ha acusado desde UPN, y al respecto se ha limitado a afirmar: "allá cada uno con sus declaraciones".
En la reunión de hoy, se ha aprobado una declaración de principios titulada "Por Navarra, con España, en Europa", leída en la rueda de prensa por la secretaria de la Comisión Constituyente y concejal de Villava Amaya Zarranz.
En el preámbulo de la declaración, el PP lamenta la "ruptura unilateral" por parte de UPN del pacto de colaboración suscrito en 1991, que ha sido "extraordinariamente positivo y fructífero", aunque destaca que, una vez materializada la ruptura, es necesario que el centro derecha navarro "recupere la iniciativa política y cultural".
"No puede ser", agrega el preámbulo, "que los navarros que de modo mayoritario vienen apoyando nuestras ideas, principios y valores, por razones inexplicadas, por falta de nuevas ideas o, simplemente, por el agotamiento de sus líderes se conviertan en rehenes de otras opciones con las que podemos compartir el modelo constitucional y del Amejoramiento del Fuero pero con las que mantenemos discrepancias sustanciales en muchos aspectos de la vida pública".
El PP de Navarra destaca la derrota del terrorismo y la defensa de las víctimas como uno de los ejes de su programa político, "sin titubeos, dudas o tentaciones negociadoras en las que el precio político a pagar sea Navarra", como ocurrió a su juicio en "el mal llamado proceso de paz entre el gobierno socialista de Rodríguez Zapatero y ETA".
La declaración de principios del PP expresa su apuesta "sin reserva alguna" por el régimen foral y subraya la "inequívoca vocación española" de Navarra, al tiempo que destaca el valor de la Constitución como garante de la libertad de Navarra frente a cualquier intento anexionista.
El documento, que anuncia que el PP abogará por la supresión transitoria cuarta de la Constitución, que regula el procedimiento de anexión de Navarra a la Comunidad Autónoma Vasca mediante referéndum, rechaza también que el Amejoramiento del Fuero sea la "bandera exclusiva de ningún grupo o partido".
El PP también rechaza la violencia terrorista y la posibilidad de que se altere el estatus institucional de Navarra mediante una negociación con ETA o una consulta popular que se derivara de esa negociación, ya que supondría en su opinión una "ruptura del consenso constitucional".
