Decenas de generaciones descubrieron la magia del cine en su suntuoso anfiteatro. Después de muchos años clausurado el edificio parecía abordar un misterioso aunque "fantástico" destino al pasar a manos de Abanca.
21 años después, el histórico edificio situado en el cruce de las calles Colón y Uruguay, erguido en pleno centro de la urbe olívica, permanece cerrado, sin actividad y sin un futuro asegurado a corto plazo.