El metal gallego deja atrás un año difícil. La pandemia de coronavirus hizo daño al sector tanto en términos de contratación como de ventas, lo que llevó a la desaparición de un total de 300 empresas. La patronal Asime espera que 2021 sea el año de la recuperación y apunta a que lo ideal sería superar, gracias al efecto de las vacunas y el repunte de los contratos, “entre el 3 y el 4 por ciento tanto en empleo como facturación”. Para ello, el metal cuenta con rascar parte de los llamados fondos COVID, los Next Generation. El secretario general de la asociación que ayer presentó los datos del pasado curso, Enrique Mallón, anunció que la patronal trabaja en 15 proyectos centrados en áreas como la automoción, el naval o las energías renovables. Según pudo saber FARO, la cuantía de los mismos oscila entre el millón y medio de euros y los 50, siendo el montante total de 300 millones de euros, con un gran protagonismo con, entre otros sectores, la eólica marina.
La quincena de proyectos en los que participa Asime están liderados por la patronal o por empresas que integran los consorcios de los que forma parte. Ninguno de ellos ha sido todavía trasladado a la opinión pública, si bien varios ya fueron presentados ante las administraciones pertinentes como manifestaciones de interés. Además de empresas de Galicia, participan multinacionales y otras firmas de Castilla y León, Asturias e incluso de Portugal.
La idea es “traer a Galicia una cantidad relevante de fondos”, dice Mallón
Los dos principales campos en los que se mueven son la automoción (más allá del proyecto AutoAncora, presentado por el sector en la planta de Stellantis en Vigo el pasado noviembre y que aspira a 1.300 millones) y las energías renovables. En el primer caso se trata de iniciativas para “completar cadena de valor”; en el segundo, en la eólica marina, una de las industrias que Asime siempre anima a impulsar en la comunidad por el potencial de sus costas.
Además de esto, los proyectos también se centran en la construcción y reparación naval, con la fabricación de unidades diferentes a las que se hacen en Galicia y la utilización de nuevos combustibles, y la construcción de edificios inteligentes.
Cifras
La existencia de estos proyectos fue mencionada por Mallón en la rueda de prensa en la que presentó las cifras del metal en 2020, aludiendo a la intención de “traer a Galicia una cantidad relevante de fondos”. En la cita con los medios, el dato más destacable del pasado curso fue la caída del 12% en la facturación (12.038 millones) y del 2% en el empleo (57.345 personas) por la pandemia. Desde Asime recordaron que las firmas del sector realizaron un “esfuerzo por buscar contratos y nuevos mercados”. Sin embargo, “varias de las actividades estuvieron muy afectadas durante 2 o 3 meses del año” y la recuperación “no se dio” como se esperaba. “2021 tiene que ser el año de la recuperación y el objetivo es que sea potente. Debería superar el 3 o 4 por ciento tanto en empleo como facturación”, indicó Mallón.
Por sectores, solo el de la automoción, metalmecánica y transporte tuvo buenas cifras en términos de empleo y facturación, con incrementos de un 1% y un 2% respectivamente. En cuanto a las construcciones y estructuras metálicas, la subida se dio en la contratación (+3%), pero no en las ventas, con una caída del 2%.
A preguntas de los periodistas, el secretario general de Asime valoró también la huelga convocada por los sindicatos para el 22 de abril y el punto en el que se encuentran las negociaciones por el convenio. “Nadie entendería una crispación y más en este panorama de sintonía y diálogo de 2020. No es admisible ningún tipo de medida de conflicto”, explicó. A su juicio, “se volverá pronto a la mesa de negociación”.
