El sector pesquero español ha mostrado su alivio por los recortes sobre sus capturas en aguas del Reino Unido tras la firma del acuerdo del Brexit, pero no ha ocultado su "preocupación" por las consecuencias que pueda tener para los intereses de la flota nacional a medio y largo plazo, según ha informado Cepesca en un comunicado.

En concreto, el sector, fuertemente arraigado con sus homólogos europeos, ha lamentado el impacto negativo que el acuerdo ha tenido para países como Irlanda, Dinamarca, Holanda o Francia que, según los primeros cálculos, podrían ver recortadas entre un 25% y un 17% sus posibilidades de pesca en aguas del Reino Unido de aquí a 2026, y advierte sobre las consecuencias que ello puede tener sobre el equilibrio pesquero europeo tras el período transitorio de cinco años y medio que ahora arranca.

El secretario general de Cepesca y presidente de la patronal europea Europêche, Javier Garat, ha trasladado este lunes la posición del sector al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en el transcurso de una reunión virtual en el que se ha analizado el acuerdo firmado entre la Unión Europea y el Reino Unido.

"A pesar del alivio a corto plazo tras conocer las cifras con más exactitud, debemos de ser prudentes y tener los ojos puestos en nuestro futuro", ha asegurado el secretario general de Cepesca.

Garat ha solicitado a Planas que España trabaje en Europa para apoyar y defender los intereses del sector pesquero europeo a medio y largo plazo, ya que, a juicio de la patronal española, "si no existe estabilidad para el sector en su globalidad, no la habrá tampoco para cada uno de los países de la UE, entre ellos España".

Igualmente, el secretario general de Cepesca ha transmitido al titular del ramo la "frustración y desesperanza" de los países miembros de la Alianza Europea de la Pesca (EUFA, por sus siglas en inglés), a la que pertenece España, para conseguir un acuerdo general, así como su percepción de que la Comisión Europea ha dado un "duro golpe" a la pesca europea.

"Consideramos que es una pena que las promesas de la CE, refrendadas en el mandato de negociación, cayeran en saco roto en las últimas horas de la negociación y ahora la UE tiene la responsabilidad de buscar fórmulas para compensar a los pescadores y no volver a dejarlos tirados", ha indicado.

Según el sector pesquero nacional, si bien en el corto plazo los recortes que van a afectar a la actividad pesquera en aguas británicas son menores de los manejados durante las negociaciones, lo que se ha traducido en un alivio para los pescadores, las consecuencias a largo plazo si son preocupantes.

El panorama, según ha transmitido el sector al titular de Agricultura en la reunión, no es el mismo a largo plazo y las consecuencias se pueden considerar como preocupantes por varias incógnitas fundamentales.

En primer lugar, porque tras el período transitorio de cinco años y medio habrá que negociar las cuotas y el acceso a las aguas anualmente, generando una importante incertidumbre para las empresas pesqueras. Esta incertidumbre no favorece la planificación empresarial y, por lo tanto, las inversiones.

Igualmente, y según el sector, se desconocen qué consecuencias tendrá el acuerdo en la Política Pesquera Común (PPC) y en la estabilidad relativa, es decir, en las claves de reparto de las cuotas entre los distintos Estados miembros. Además, tampoco se puede conocer cómo afectará a los intercambios de cuotas entre los diferentes países, puesto que, a partir del Brexit, todos los países miembros que faenan en las aguas del Reino Unido dispondrán de menos cuotas que ofrecer.

Por último, el sector ha mostrado su preocupación por las consecuencias en la gestión sostenible de los 119 stocks compartidos. "Es necesario seguir trabajando con nuestros colegas de otros países para defender a la pesca europea hasta las últimas consecuencias, tal y como hemos hecho hasta ahora en el marco de EUFA, y gracias a la cual, creo sinceramente, hemos podido aliviar los resultados de estas negociaciones", ha subrayado Garat.

En la reunión, por parte de Cepesca, también han participado Iván López y Jesús Lourido, presidente de Agarba y gerente de la OPP77 Puerto de Celeiro, respectivamente.