El consejo de ministros de Pesca se estanca. La primera de las dos jornadas clave para decidir los totales admisibles de capturas (TAC) y cuotas para 2021 concluyó “sin avances” y con “estancamiento” provocado por las negociaciones del Brexit, clave para el futuro de muchos caladeros. La propuesta, avanzada por FARO, de prorrogar las cuotas para el primer trimestre en las aguas afectadas por la desconexión de Reino Unido sigue encima de la mesa, pero no será hasta mañana cuando llegue la primera propuesta de consenso. Mientras, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, intentó ayer tejer alianzas con sus homólogos de Francia, Portugal e Italia.

Ayer fue el momento de las conversaciones bilaterales y trilaterales sobre las cuotas pesqueras. “Espero que mañana por la mañana podamos presentar un texto en el que seguir trabajando o que aprobar inmediatamente”, indicó la ministra de Agricultura de Alemania, Julia Klöckner, que ostenta la presidencia este semestre. A partir de ese texto comenzarán las negociaciones de verdad, que como es habitual podrían alargarse hasta bien entrada la madrugada.

Sacando la posible prórroga de los cupos para el primer trimestre en las aguas compartidas con Reino Unido (en el que se podría capturar hasta un 25% del a cuota asignada para 2020), sobre la mesa están las propuestas de recorte para aguas de Galicia y el resto del Cantábrico Noroeste. En especial destacan un 13% menos de merluza (7.825 toneladas), otro tanto de rape (3.672) y una reducción del 11% en el rapante (2.158 toneladas).

Además de la delegación española, en Bruselas también está la Consellería do Mar, con Rosa Quintana a la cabeza y el demoledor informe presentado en las últimas semanas sobre el daño económico (de casi 30 millones de euros) que dejaría en la flota el establecimiento de cupos propuesto de entrada por Bruselas. “Partimos de una propuesta dura”, apuntó Quintana.