El grupo ítalo-estadounidense Fiat Chrysler Automobiles (FCA) informó ayer de que ha llegado a un acuerdo con la Justicia de Estados Unidos para poner fin a la demanda colectiva a la que se enfrentaba por el uso de software ilegal para ocultar las emisiones de sus motores diésel. FCA explicó que "ha recibido la aprobación final" de este acuerdo para poner fin a la disputa, pero reitera que no cometió ninguna infracción ni ninguna irregularidad. "Los clientes que presenten una reclamación válida recibirán un pago en efectivo. Según el acuerdo de demanda colectiva, los propietarios pueden recibir hasta 3.075 dólares (unos 2.747 euros), y los que alquilaron los vehículos con opción de compra, hasta 990 dólares (unos 884,4 euros)", aseguró vía comunicado.