Como ya viene siendo habitual, las previsiones de recaudación fiscal del Gobierno para 2017 pecaron de optimistas. Los presupuestos recogían casi 201.000 millones de euros, pero, finalmente, fueron 198.000 por los desvíos a la baja en el Impuesto de la Renta (IRPF) y el de Sociedades, que pagan las empresas en función de sus beneficios. Aún así, los recursos de la Agencia Tributaria subieron un 4,1%. Llegarían al 6,4% si no fuera porque en julio entró en vigor el nuevo sistema de suministro de información del IVA que, además de obligar a remitir las facturas en solo cuatro días, desplaza a 2018 algunos de los ingresos. Un efecto que se nota en Galicia, donde el gravamen más ligado al consumo, y uno de los que aporta más dinero a la caja, cerró el pasado ejercicio en negativo y frenó la recaudación total en la comunidad. Creció un 1,1%, tres veces menos, por tanto, que la media estatal. Lo que no impidió batir un máximo histórico.
Los ingresos de Hacienda en la región alcanzaron los 6.668,4 millones de euros. Unos 71 millones más que en 2016. Solo Murcia, con un incremento del 0,3%, y Asturias, donde cayeron un 4,6%, presentan una peor evolución de la recaudación. De hecho, el alza en Galicia es la más baja de los últimos cuatro años. Al calor de la recuperación de la economía y de las reformas en varios tributos para exprimirlos, en avance en 2014 fue del 2,1%; del 10,7% en 2015 y un 3,2% en 2016.
En Cantabria el ascenso fue del 53%. En Castilla-La Mancha superó el 14%. Y un 13,3% en País Vasco. Son las tres comunidades con mejor evolución, según los datos publicados ayer por la Agencia Tributaria.
La contribución del IRPF en Galicia llegó a los 2.689 millones de euros, un 6,8% más que el ejercicio anterior, en línea con la subida registrada en el conjunto del Estado (6,4%). La de Sociedades, en cambio, disminuyó un 5,2%, hasta los 1.230 millones de euros, frente al aumento nacional del 6,8%. En la Renta que pagan los no residentes, la subida fue del 18,2% (113 millones de euros).
La cara de los impuestos del consumo está en los Especiales, disparados: un 31,3% más, con 118 millones de euros. La cruz, en el IVA, que sufrió una reducción de 106 millones, un 4,5%, a la espera de cómo puede influir en Galicia el diferente calendario de parte de los ingresos por la activación del nuevo sistema de información. De Tráfico Exterior llegaron cerca de 100 millones, lo que supone un aumento del 1,3%. Pero el gran subidón en los ingresos procede del capítulo nutrido por los recargos de apremio, intereses de demora y sanciones tributarias. Se disparó un 26%, con 82 millones de euros de recaudación.
