La campaña de verano aumenta la facturación de la hostelería gallega a máximos históricos

Mientras la economía gallega y sus principales sectores todavía mantienen viva su odisea por recuperar sus niveles de actividad y negocio previos al estallido la crisis, la hostelería, por el contrario, se reafirma en su papel de nuevo motor económico tras culminar en agosto su mejor mes en facturación de toda la historia.

El cóctel de recuperación económica en la zona euro con España a la cabeza y la inestabilidad en ciertos destinos del Mediterráneo están canalizando un fuerte repunte de la demanda que, unido al ligero aumento de precios, han permitido el crecimiento impulsar los ingresos del sector a ritmo de doble dígito. Su cifra de negocio escaló un 12,5% el pasado mes de agosto respecto al mismo mes del año anterior. Este avance eclipsa incluso al registrado a nivel estatal, en donde el incremento fue tres veces inferior (4,1%). El presidente de la Federación de Hostelería de Pontevedra, César Ballesteros, achaca buena parte de la responsabilidad de este repunte también a la mejora en las conexiones aeroportuarias, que explican la buena marcha del sector en las Rías Baixas. "En los últimos meses estamos viendo la puesta en marcha de vuelos directos a destinos a los que antes no había", comenta.

Ballesteros celebra los datos, pero se muestra cauto. "Los niveles de beneficios todavía no han recuperado sus niveles anteriores a la crisis", comenta, y, además, hace hincapié en el limitado potencial de mejora de estos resultados en verano, lo que deja de manifiesto que "todavía queda la asignatura pendiente de los meses de invierno", en los que la facturación desciende hasta casi la mitad de sus máximos veraniegos.

Una buena muestra de hasta qué punto pierde fuelle el sector una vez se consumen los rayos de sol del verano se encuentra en los datos de ocupación de los hoteles. Según los datos del mes de septiembre, los centros gallegos cerraron el mes con una ocupación del 47,3%, 20 puntos porcentuales menos que en agosto.

Motor de empleo

Uno de los motivos por los que el incremento de la facturación no se está trasladando con la misma fuerza a los resultados de estas compañías es el fuerte repunte que protagonizan sus plantillas en los últimos tiempos, que en Galicia se cifra en 2.514 nuevos empleos. De cada 100 puestos de trabajo que se generan en Galicia, 13,2 tienen lugar en el sector hostelero. De hecho, el papel de esta actividad como dinamizadora de empleo es todavía más relevante que en el resto del Estado, en donde es responsable de un 11,6% de los nuevos puestos de trabajo generados.

La pujanza de la hostelería impulsa al sector servicios gallego -que engloba también al transporte y comercio minorista, entre otros- a un ritmo de crecimiento medio del 8,9% en los ocho primeros meses del año. Se trata del segundo mayor crecimiento de todo el Estado, tan solo superado por el 10,3% registrado por la comunidad foral de Navarra en los ocho primeros meses del año.

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