El Instituto Galego de Promoción Económica (Igape) concedió ayudas por más de cinco millones de euros a la textil coruñesa Caramelo y más de un millón a la ordense Viriato en los últimos años antes de que ambas empresas entrasen en proceso de liquidación a finales del año pasado tras no lograr superar el concurso de acreedores.

Caramelo -controlada por la firma patrimonial del empresario Manuel Jove- recibió en 2010 cinco millones de euros de financiación de Xesgalicia y Viriato, un millón de euros de esta misma línea en 2015. La Xunta destinó además subvenciones para la internacionalización de Viriato por 140.000 euros, así como 11.000 euros con este mismo fin para Caramelo.

El director del Igape, Juan Cividanes, reveló estos datos en la Comisión de Economía del Parlamento gallego y reveló que las empresas no incumplieron las condiciones de estas líneas de financiación porque están destinadas a "favorecer la actividad", por lo que "no hay exigencia para mantenimiento del empleo".

En este sentido, el alto cargo del organismo dependiente de la Xunta incidió en que las ayudas contaban con apoyo de las empresas y entidades financieras, "según lo establecido en las convocatorias" de esas subvenciones empresariales.

El responsable del Igape respondió así a una pregunta del PSdeG, en la que la diputada socialista Begoña Rodríguez lamentó las "tristes noticias" de los cierres de Caramelo y Viriato, que "dejan en la calle" a casi 300 personas, en su mayoría mujeres.