La industria aeronáutica gallega está en pleno crecimiento y en continua evolución, con sus departamentos de I+D+i llamando a las puertas de los gigantes del sector como Boeing o Airbus. Así lo atestiguan los últimos datos ofrecidos por el Consorcio Aeronáutico Gallego (CAG), que cifran en un 7% el aumento de la facturación de este sector el pasado un año. Unos "números muy buenos" que, sin embargo, todavía pueden mejorar a través de otros nichos de mercado. Así lo cree al menos Santiago Hernández, catedrático de la Universidade de A Coruña (UDC) que intervino en la jornada técnica organizada por el CAG el pasado viernes, en la que habló sobre los posibles proyectos que tiene la industria gallega en América, más concretamente en Estados Unidos: los jets y los very light jets (VLJ), o microjets, es decir, un jet "personal" de pequeño tamaño y equipado con las últimas tecnologías.

"Se trata de un segmento de la aeronáutica que va a crecer mucho", informó el coordinador del Grupo de investigación Mecánica de Estructuras de la UDC especializado en -entre otras cosas- estructuras aeronáuticas. "Galicia tiene todos los ingredientes para lanzarse a hacer estos aviones", comentó.

Los VLJ tienen capacidad para entre 6 y 8 personas y están pensados para ser operados por un solo piloto. "En un principio se esperaba que costaran menos de 1 millón de dólares, algo que no se consiguió del todo", explicó Hernández. Son aparatos dotados de las últimas tecnologías y con un peso habitualmente por debajo de los 4.500 kilos. "Es la aviación ejecutiva. El año pasado se entregaron casi 700 jets", indicó el experto, que concretó que los VLJ significaron una tercera parte.

Algunas empresas que se dedican a esto en la actualidad son Embraer (con el Phenom 100E), Cessna o la japonesa Honda, con su división Hondajets. "En Galicia empresas como Delta Vigo o Coasa tienen perfectamente la capacidad para hacer la estructura de estos aviones", explicó Hernández, que recuerda que debido a su tamaño las fábricas para estos aparatos "no necesitan de una inversión muy grande".

Por otro lado, también relacionado con lo que se está gestando con el Civil UAVs Initiative de Rozas (en Lugo), Hernández apuntó también a la conocida como aviación experimental, en la que destacan las firmas Space X, del conocido Elon Musk (responsable también de Tesla) y Blue Origin, de Jeff Bezos (fundador de PayPal o Amazon), ambas enfocadas al transporte aeroespacial.

"En este campo se podrían trabajar con los módulos de los cohetes, que tienen unos ocho metros de altura", indicó.

Con estos dos segmentos de la aviación, desarrollados principalmente en Estados Unidos, el catedrático de la UDC opina que la industria gallega tiene posibilidades para el diseño y la fabricación de materiales compuestos o de utillaje de distintas escalas; la fabricación de aeroestructuras; ensayos para el control y la calidad de las piezas; sistemas de control y aviónica, así como trabajos para el desarrollo de fly-by-wire (pilotaje por cable) y del smart cock pit (los habitáculos inteligentes para pilotos).