La Bolsa española registró ayer las mayores pérdidas de entre las principales plazas europeas, que en una jornada más se vieron arrastradas por los temores que suscita una posible salida de Grecia de la zona euro, además de por la caída del precio de crudo y de la moneda única, el euro. El Ibex 35 se dejó ayer el 1,22%, tras haber perdido en la jornada anterior el 3,45%. Le siguieron en números rojos el mercado de Londres, que bajó el 0,79%; el de París, el 0,68%; Milán, el 0,25%; y el de Fráncfort, el 0,04%.

Y ello a pesar de que los mercados europeos, tras el desplome sufrido el lunes, iniciaron la sesión intentando la recuperación, que se inicialmente se vio sustentada por la apertura en positivo de Wall Street. No obstante, tras el desplome que sufrió el precio del petróleo, el mercado de EE UU volvió a teñirse de rojo, y con él, las plazas europeas.

El barril de crudo Brent para entrega en febrero acabó la jornada en el mercado de futuros de Londres en 51,10 dólares, un descenso del 3,78% respecto a la sesión anterior y su mínimo en casi seis años. A todo ello se sumó en Europa la incertidumbre sobre el futuro político de Grecia ante las elecciones que se celebran el próximo 25 de enero, unos comicios de los que podría salir vencedor el partido izquierdista Syriza, contrario a las medidas aprobadas con Europa a cambio de la ayuda que recibió el país.

Ante esta suma de situaciones, la elevada volatilidad del mercado y la caída del euro a mínimos del entorno de 1,192 dólares, de nada servía a las bolsas conocer que el BCE podría estar estudiando tres posibles opciones para comprar bonos soberanos.