El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente dio ayer vía libre a la perforación de "sondeos exploratorios" en busca de petróleo en aguas próximas a Canarias, aunque fija medidas "preventivas y correctoras" para evitar posibles riesgos.

Las indagaciones se llevarán a cabo mediante un buque de posicionamiento dinámico a unos 60 kilómetros de la costa canaria, que se encargará de tomar muestras de roca o fluidos para detectar la posible existencia de hidrocarburos en la zona. El permiso "no implica en ningún caso la extracción de petróleo" y advierte de que, en el caso de que el promotor quisiera desarrollar esta actividad en el futuro, "estará obligado a presentar un nuevo proyecto" que será sometido a un nuevo procedimiento de evaluación ambiental, abierto a la participación pública.

La declaración identifica una serie de "impactos previstos" durante los sondeos y establece por ello la obligatoriedad de tomar medidas de prevención y corrección "ante hipotéticos sucesos accidentales".