Sargadelos solicitó ayer el concurso de acreedores voluntario ante el juzgado de lo Mercantil de A Coruña con una deuda que apenas alcanza los cinco millones de euros, y que no ha conseguido refinanciar durante los cuatro meses que la ley concursal da de plazo para evitar la suspensión de pagos a las empresas que se declaran en preconcurso.
El emblemático e histórico grupo de producción cerámica de diseño acudió a instrumento previo el pasado 7 de noviembre con una deuda de 2 millones con la banca, y otros 800.000 euros con XesGalicia, según explicó el presidente del consejo de administración de Cerámicas O Castro y Cerámicas de Sargadelos, José Luis Vázquez Montero.
El directivo del grupo advierte de que a estas cifras hay que sumar lo que se adeuda a las 71 trabajadoras despedidos con un ERE el pasado mes de diciembre, y a los que el grupo no abonó las indemnizaciones por despido (de 20 días por año trabajado) por "falta de liquidez", una suma que Vázquez no se atreve a precisar y que según fuentes sindicales, puede rondar el millón de euros.
La compañía adeuda a algunos de los trabajadores -y a parte de los despedidos- dos pagas extraordinarias, según las mismas fuentes, y negoció aplazar varios pagos a la Agencia Tributaria, según reconoció el presidente del consejo, quien aseguró que por lo demás, la empresa no ha dejado de atender los pagos a proveedores y las nóminas mensuales.
