La fiscalía federal de EE.UU. acusó hoy formalmente a dos exempleados del banco JPMorgan Chase, el español Javier Martín-Artajo y el francés Julien Grout, de ocultar parte de las pérdidas de más de 6.000 millones de dólares en sus operaciones financieras en Londres.

Los dos acusados habrían participado en el intento de enmascarar el volumen de las pérdidas causadas por posiciones en el mercado de productos derivados, según señalan documentos de la acusación.

Martín-Artajo, supervisor de la estrategia de inversiones de la oficina de JPMorgan en Londres, y Grout, un operador, han sido acusados de fraude, falsificación de documentos bancarios y contribución a documentos oficiales falsos.

Además, también han sido acusados de conspiración para cometer todos esos delitos, según indican los documentos oficiales de inculpación divulgados hoy por la fiscalía federal del distrito sur de Manhattan.

Los documentos indican que, desde marzo hasta mayo de 2012, Martín-Artajo y Grout "aumentaron artificialmente" algunas cuentas "para ocultar el auténtico alcance de las pérdidas de cientos de millones de dólares".

Finalmente, en julio de 2012, JPMorgan Chase tuvo que corregir sus cuentas del primer trimestre de ese ejercicio en unos 660 millones de dólares.

Las acusaciones fueron presentadas por el fiscal de ese distrito federal, Preet Bharara, ante la juez federal Sarah Netburn, y están detalladas en documentos cada uno de quince páginas de extensión.

Por otra parte, el operador Bruno Iskil, conocido como la "Ballena de Londres", no ha sido inculpado tras llegar a un acuerdo con la fiscalía para cooperar en el caso y testificar.

Según la prensa estadounidense, Grout reside actualmente en su país, mientras que Martín-Artajo y su familia no están en su casa de las afueras de Londres.

Se desconocen los pasos que seguirán las autoridades judiciales estadounidenses para lograr la extradición de ambos.

El fiscal Bharara tiene previsto ofrecer una conferencia de prensa a las 18:00 GMT en la que ofrecerá más detalles del caso y podría avanzar qué piensa hacer su oficina para intentar que ambos comparezcan ante un tribunal estadounidense.