España ha perdido cuatro posiciones en el ranking mundial de mercados automovilísticos durante la crisis, al caer de la décimo primera posición que ocupaba en 2007 al puesto décimo quinto en que se situó al cierre del pasado año. Así se desprende de un informe de la Organización Internacional de Constructores de Automóviles, donde consta que el mercado español se ha visto superado por los de Corea del Sur, Irán, Tailandia y Canadá durante la crisis económica.

En concreto, en el año 2007 se comercializaron en España 1,61 millones de turismos y de todoterrenos, lo que otorgaba al país la décimo primera posición en la clasificación global. Esta cifra cayó en 2012 hasta 699.589 unidades, y España quedó relegada a la décimo quinta posición.

La crisis y el crecimiento de los países emergentes han provocado un cambio sustancial en la distribución global de las ventas de automóviles, que se desplazan fundamentalmente hacia la región de Asia-Pacífico y descienden en el saturado mercado europeo. China es el primer mercado automovilístico mundial, con unas ventas de 15,5 millones de coches en 2012, una cifra que duplica los registros de 2007, cuando en el mercado chino se comercializaron 6,29 millones de automóviles.