Transportes Azkar, la empresa que la familia Somoza y sus directivos acaban de vender al grupo alemán Dascher, entrará en el mercado marítimo con la integración de Transunión, un operador global de transporte que factura 95 millones al año. El grupo alemán anunció el pasado 17 de enero la compra de esta empresa valenciana, un operador transitario global con sedes en Turquía y Latinoamérica, que complementará la oferta de Azkar. El grupo que tuvo capital gallego hasta el pasado 15 de enero y emplea a 300 trabajadores en Galicia cuenta con una sólida estructura en el servicio por carretera dentro de la península y hace dos años que opera en el servicio de handling en las terminales de carga de los aeropuertos de Zaragoza y Madrid-Barajas.

El recién nombrado presidente de Azkar, el lucense José Antonio Orozco, -antes consejero delegado y vicepresidente- explicó que los servicios que presta Transunión son "muy complementarios" para Dascher y Azkar, que podrá mover por carretera todos los tráficos que la valenciana capta en el tráfico marítimo y aéreo. "Es el primer paso de la nueva era que para nosotros era impensable hace seis meses pero ahora estamos hablando de integrar en la península ibérica todos los modelos de transporte: tierra, mar y aire", detalló Orozco, quien enmarcó la adquisición de Transunión en el plan de inversiones por 1.300 millones de euros anunciado cuando Dascher informó de la compra de Azkar.

Con estas dos operaciones, el grupo alemán ha protagonizado las dos mayores operaciones corporativas del sector del transporte en España.

El objetivo de Azkar, que tiene en Inditex a uno de sus mayores y mejores clientes, es dar una oferta global a sus clientes. "Queremos adaptarnos a las nuevas cadenas de suministro, a las nuevas circunstancias del mercado y a las nuevas costumbres del consumidor. No buscamos ser los más grandes ni los más pequeños, pero sí pretendemos ser el entorno logístico más flexible, versátil y eficiente", comentó el presidente de Azkar.