Unidos por un "eje revolucionario" al que denominaron "G-2", ambos mandatarios volvieron a proclamar "la muerte del capitalismo" y abogaron por un nuevo orden mundial que prescinda de organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y la Organización Mundial de Comercio (OMC).

"La cumbre del G-20 terminó, sin pena ni gloria. Basta leer las conclusiones, no son para nada las soluciones que el mundo clama, que el mundo requiere ante la gran crisis del capitalismo internacional", afirmó Chávez.

El presidente sudamericano se burló de las propuestas aprobadas en la capital británica al considerar que no son más que "las mismas medicinas que están matando al paciente".

"Un billón de dólares, más dinero para un hueco sin fondo. Pero no solo eso, decidieron fortalecer al gran culpable o a unos de los grandes culpables de la crisis, el FMI. Ese fondo habría que eliminarlo y pretenden darle oxígeno", señaló.

"El Banco Mundial es una herramienta del imperialismo y por si fuera poco proclaman el fortalecimiento de la OMC y las normas del libre mercado. El dios mercado dicen ellos, instrumento del imperialismo", reiteró.

En este sentido, Chavez proclamó que "llegó la hora del fin del imperialismo. Se hunde el imperialismo y sobre sus cenizas surgirá un mundo nuevo".

Ese nuevo sistema, en el que reinará "la paz, la independencia y la libertad", ha comenzado a crearse en Teherán con el nacimiento del banco binacional, insistió Chavéz,

"Sin duda que este acto de hoy querido hermano es parte del nacimiento de este mundo nuevo. Aquí si estamos creando soluciones para el fortalecimiento de nuestra economía, para el incremento de nuestro desarrollo social", afirmó.

La apertura del banco binacional Irán- Venezuela es el acto estrella de la séptima visita que desde el jueves y hasta mañana sábado realiza el presidente venezolano a Irán.

La entidad bancaria, diseñada según ambos países como alternativa a la crisis financiera internacional, comenzará a funcionar con un capital inicial de 1.600 millones de dólares, el mismo monto con el que se desarrollará el Fondo Venezuela-Irán.

Aunque ambos países han depositado gran parte de sus esperanzas en este proyecto, que consideran modélico para el restos del mundo, los expertos dudan de su viabilidad.

Hoy, durante la inauguración, Ahmadineyad volvió a insistir en esta idea e invitó a las naciones del mundo a emprender proyectos similares.

"Estamos aquí para diseñar y crear un nuevo mundo. Pero los que han hecho daño al mundo han vuelto a fracasar mientras nosotros estamos haciendo algo nuevo. Reuniones como la de Londres no pueden reanimar algo que cae como un muerto", afirmó Ahmadineyad.

Nosotros "el G-2 somos ya responsables de todo el mundo, para hacer un mundo mejor para todos. Lo que estamos haciendo parece solo un banco, pero la verdad es que es una acto de voluntad y justicia para todo el mundo. Es un ejemplo de esperanza y vitoria para todos", apostilló.

Chávez llegó el jueves a Teherán en el marco de una gira que arrancó en Qatar y que responsables venezolanos han descrito como una "inversión" de futuro.

En el primer día de trabajo, los dos delegaciones revisaron diversos proyectos de cooperación científica, agrícola, energética, industrial y en especial militar, un sector este último muy activo pero que ambos países desarrollan con secretismo.

En el sector energético se estudió un plan para la construcción de dos factorías de refinado de capital mixto, una en Venezuela y la otra en Irán.

Aunque Teherán es el segundo mayor exportador de crudo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), tiene una industria de refinado muy pobre debido a las sanciones internacionales y se ve obligado a importar combustible.

El sábado, Chávez visitará varios proyectos de desarrollo industrial, en los sectores farmacéutico y alimenticio.

En la tarde, antes de partir rumbo a extremo oriente, será recibido por el líder Supremo de la Revolución Islámica iraní, ayatolá Ali Jamenei.