Antía y Blanca convierten O Corpiño en su plató de rodaje

Buscan anécdotas, leyendas e historias relacionadas con la romería de O Corpiño y lo hacen para presentar un proyecto de fin de carrera en forma de documental. Antía Rodeiro y Blanca Navarrete estarán este fin de semana en el santuario mariano de Santa Baia de Losón para ir adelantando trabajo de un documental que debería estar rematado en septiembre. El inicio de esta aventura lo narra Antía recordando que “hablando con unos amigos me contaron alguna experiencia que había tenido la abuela de uno de ellos yendo al Corpiño. Yo nunca había escuchado hablar de eso, empecé a interesarme el pasado verano y le dije a Blanca que podíamos hacer un documental. Ella aceptó con la condición de encargarse de la producción y yo de la dirección”. La joven desvela además que “de momento, estamos pensando en un metraje de entre diez y veinte minutos, más o menos. Ya estuvimos de visita en O Corpiño y nos gustó”.

La pareja de amigas y compañeras han puesto en marcha una ambiciosa campaña vía WhatsApp para ampliar su documentación. Al respecto, Antía explica que “tenemos ya contactos con gente pero, sobre todo, queremos que nos hablen. Indagando, al final te das cuenta de que es un tema más profundo que simplemente la historia que se puede ver en los medios, sino que tiene que ver mucho con la fe y ponerse en la piel del ofrecido es lo que estamos viendo ahora nosotras para contar una historia que realmente oscila entre la realidad y la ficción dependiendo de lo que cada uno crea”. La filmación del documental se llevará a cabo durante todos los días de la popular romería. Antes de eso, está previsto realizar entrevistas y “probar a ver si podemos grabar en espacios y localizaciones. Estamos ahora con los permisos para grabar en el santuario”, añade la directora del corto dedicado al Corpiño.

Aunque en principio son las dos las que llevan el peso del trabajo, han encontrado también colaboración por parte de algunos de sus compañeros de estudios: “Todavía estamos conformando el equipo técnico. Para un documental no hacen falta tantas manos como en el caso de una ficción peo sí que es necesaria la ayuda. Por el momento tenemos confirmado a un compañero para que haga dirección de fotografía y estamos buscando montaje y sonido, para las que ya tenemos varias candidaturas. Y en cuanto al título, todavía es pronto para aventurarse en uno en concreto pero Antía manifiesta que “de momento, el título provisional es “O Corpiño” pero no te quiero decir que sea definitivo porque está abierto a cambios y sugerencias”.

Otro de los aspectos de todo trabaja cinematográfico, incluso en los proyectos fin de carrera, tiene que ver con su visionado. En este sentido, las dos estudiantes tienen claro que “queremos hacer una versión para poder enviar a festivales y que el documental tengo un cierto recorrido. También queremos que sea una pieza divulgativa, que la gente lo pueda ver y que pueda aprender o cuestionarse las cosas.” Y Antía adelanta en lo que al resultado final se refiere “que nos gustaría que nuestro documental oscile constantemente entre la ficción y la realidad, hacerlo un poco experimental, que al final sea el espectador el que decida qué creer de lo que está viendo. Para eso necesitamos testimonios de personas que estén contando experiencias de su propia fe”. Para que todo esto llegue a buen puerto las dos cuentan con algunos apoyos destacados: “Tenemos contacto con el rector pero todavía está pendiente que nos reunamos con él. Es muy amable y desde el primer momento se ofreció a ayudarnos. También contactamos con Daniel González Alén y si todo va bien, quedaremos con él en principio este domingo. También tenemos que agradecerle a la facultad que nos ceda todo el material”, aclara la directora del documental.

Involucradas

Blanca Navarrete es la vertiente pragmática de esta propuesta audiovisual de la USC. “Es un proyecto en el que la verdad tanto Antía como yo estamos bastante involucradas en los dos procesos de dirección y producción”, subraya la joven de Cambre. Y quiere dejar claro que como buen producto cinematográfico, el documental no va a salir barato: “Aunque sea un corto de clase tiene muchos gastos que hay que afrontar como transporte, dietas o derechos de imagen porque algunas imágenes para usarlas tenemos que pagar. Por eso estamos muy agradecidas a la ayuda recibida desde la facultad”.

La productora recalca que “Antía propuso el tema y yo, la verdad, con ella voy a cualquier parte. Es una historia muy interesante y poder hacer un documental de una parte de nuestra cultura también nos parecía una muy buena idea”. Esta estudiante de Comunicación Audiovisual también quiere destacar que “a los que nos dedicamos a esto lo que más nos gusta es poder mostrar nuestro trabajo. A lo mejor, a la gente que no está metida en este mundillo le parece que todo se basa en salas de cine, pero realmente el audiovisual funciona empezando siempre por los festivales”.

Y en cuanto a plazos, Navarrete recuerda que “nosotras vamos a defender nuestro trabajo en septiembre, así que sobre el 15 de julio debería estar todo terminado. Al grabar la romería el 24 de junio contamos con poco tiempo para el montaje. Pero como también vamos a grabar entrevistas e iremos más días a filmar lo que es el santuario podemos ir adelantando un poco el proyecto”. Y en eso están ahora.

Suscríbete para seguir leyendo