A Estrada somete a su alameda a un esperado y necesario lavado de cara
Las brigadas municipales emprenden una limpieza para eliminar toda la suciedad adherida al hormigón y evitar resbalones
La alameda municipal de A Estrada se prepara para despedir el año de una manera más digna. La blancura de los bancos y paseos de hormigón pulido que caracteriza a este parque desde su ampliación y remodelación llevaba meses cubierta por una pátina de suciedad y verdín que, además de afear mucho este espacio público, supone en la zonas más sombrías un importante peligro de sufrir un resbalón. En la mañana de ayer las brigadas del Concello sacaron el agua a presión y la maquinaria y se fueron desplegando por el céntrico recinto para ir configurando estampas de un asombroso “antes y después”.
La primera de las plazas que se van sucediendo en los jardines municipales dio más trabajo del esperado. Y es que tanto los bancales como el pavimento estaban en muchos puntos completamente negros, por no hablar de la suciedad que presentaba la fuente. En pocas horas la imagen de esta zona del parque, la más próxima al palco de la música, cambió por completo.
El alcalde, José López Campos, había anunciado hace unos meses la intención del gobierno de darle un lavado de cara a la alameda y parece que el momento ha llegado. Se espera que la medida se extienda a todo el recinto y repare también los problemas de iluminación que fueron surgiendo.
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