A Estrada, mochuelo para muchos olivos

Realizan la recogida de la aceituna en olivares del municipio en una campaña con la producción mermada por el tiempo

Trabajos de recogida de la aceituna en la finca de As Besadas, en Callobre.

Trabajos de recogida de la aceituna en la finca de As Besadas, en Callobre. / Bernabé/Javier Lalín

Ana Cela

Ana Cela

En la finca As Besadas, en la parroquia estradense de Callobre, se estuvo esperando durante días a que el cielo concediese una tregua. Sin embargo, en la mañana de ayer se puso al mal tiempo buena cara y una cuadrilla de trabajadores emprendió una campaña de recogida de la aceituna que ya se habría completado, si las condiciones meteorológicas lo hubiesen permitido, hace al menos 15 días.

Lo habitual es varear el olivo –zarandearlo con ayuda de una máquina– para que el fruto caiga al suelo. Sin embargo, en algunos casos la aceituna se toma directamente del árbol de manera manual. Toda la recolección se transporta a una almazara de Quiroga, en la provincia de Lugo, ya que los productores todavía no vieron cumplido su deseo de que contar con un centro de transformación en el propio municipio para obtener la aceite de oliva virgen extra que comercializan desde A Estrada bajo dos etiquetas comerciales: As Besadas y Ouro da Chousa.

Las cajas de aceituna, listas 
para la almazara.   | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

Las cajas de aceituna, listas para la almazara. | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN / Ana Cela

Al abrigo del proyecto Cernes surgieron en A Estrada cerca de una veintena de plantaciones de olivo. Buena parte de estos productores están integrados en la Asociación de Produtores de Aceite e Aceituna de Galicia (Apaag). Aunque hay dos de estos productores que han apostado por comercializar su excedente, muchos otros elaboran el producto para autoconsumo.

La campaña se presenta este año con una producción muy mermada. Juan Carlos Mosquera, promotor de Ouro da Chousa, lo confirmaba ayer con datos. En la misma finca de Moreira recogió el año pasado aceitunas para 850 litros de su aceite. En este 2023 fueron 420. Quizás la lluvia durante la floración tuvo mucho que decir y ahora se recogen las consecuencias de su dictado.

“Ya se veía en los árboles que no había la misma cantidad”, apuntó Elvira Blanco Ribadulla, desde As Besadas. Asume que la sucesión de temporales del otoño tampoco contribuyó mucho, en la medida en que partió y causó daños en varios olivos. Su plantación tiene ya una década de trayectoria y, aunque fallaron algunos ejemplares y se replantó, estima que en esta finca de Callobre hay actualmente alrededor de 600 olivos.

Una cuadrilla de Quiroga realizaba ayer con habilidad los trabajos de recogida. “Cada año se recoge un poco más. Los propios árboles van cogiendo cuerpo, se van haciendo más frondosos”, apuntó esta productora estradense.

Trabajos para varear, de forma 
mecánica, los olivos. 
  | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

Trabajos para varear, de forma mecánica, los olivos. / BERNABÉ/JAVIER LALÍN

La previsión que barajaba Elvira Blanco es que ayer mismo se moliese en la almazara la aceituna recogida en este olivar. Indica que, completada esta fase, se trabaja la masa en frío hasta que va desprendiendo el aceite y, seguidamente, se pasa al depósito. Allí se deja reposar hasta que sirve para ser decantado. Es entonces cuando el aceite llega a la sala de envasado de As Besadas para ser embotellado a medida que la demanda lo va requiriendo. Lo que es seguro es que en las primeras semanas de diciembre se puede saborear el “oro líquido” de esta campaña.

El rendimiento de la aceituna es diferente y se ve afectado por muchas variables. Elvira calcula que precisan alrededor de 10 kilos de fruto para cada litro de aceite de As Besadas Por su parte, Carlos Mosquera calculó que unos 7,5 kilos de las aceitunas de su finca pueden llenar una botella de un litro de aceite. Indica que los alrededor de 850 litros de Ouro da Chousa de este año necesitaron entre 2.500 y 3.000 kilos de olivas.

Gourmet y proximidad

Las dos referencias de aceite de oliva virgen extra con ADN de A Estrada se comercializan en tiendas gourmet y en comercio de proximidad. En ambos casos el consumidor puede apreciar una diferencia abismal con relación al aceite que puede consumir habitualmente. El sabor es intenso y –por qué no decirlo– exquisito.

En estos momentos, la Asociación de Produtores de Aceite e Aceituna de Galicia reúne a 160 productores de la comunidad, que condensan 144 hectáreas de plantaciones y 152.000 olivos. A Estrada es una de las zonas en las que pudieron encontrarse más olivos autóctonos gallegos.