Los votantes más fieles

Los lalinenses quisieron el pasado domingo que el Partido Popular fuese el claro vencedor y la candidatura de José Crespo se impuso en 36 de las 37 mesas repartidas por el término municipal, cosechando el 53,12% de las papeletas emitidas, consiguiendo convencer a 945 vecinos más que hace cuatro años. Además, en 13 mesas su porcentaje de voto se situó por encima del 60 por ciento.

¿Cuáles son las parroquias más fieles a cada una de las cuatro organizaciones que concurrieron a los comicios locales este 28-M? El Partido Popular consiguió unas mayorías insultantes en Maceira, Moimenta y Losón, parroquias en donde arrancó el mayor porcentaje de voto. La primera es un feudo tradicional popular y ahí Crespo logró el 77,38 de las papeletas válidas depositadas en urna. En Moimenta fueron el 69% y el 68,48 por ciento en Dozón. En el otro extremo aparece Moneixas (37%), una de las urbanas (42%) y la de Vilanova (49%).

Los mejores balances de Compromiso se registraron en Sello (31,82%), una de las dos de Donramiro (28,4) y Vilatuxe (21%). Maceira, Catasós y Cercio fueron, por este orden, las peores plazas para la organización de Rafael Cuíña, pues de sus urnas solo salieron sufragios que suponían el 6,5, el 7,8 y el 9,1 por ciento de los totales.

El PSOE fue el único que no llegó al 30% de apoyos en una mesa electoral, dato que rozó en la de Cercio-Camposancos, con el 27,5 por ciento. Bermés (21,47) y Palmou (18,8) fueron sus mejores resultados en el rural. Y los peores del partido de Alba Forno los padeció en Moneixas (6,9), Barcia (7,6) y Gresande (8,4).

El BNG fue la única fuerza que superó al PP en una urna y esto aconteció en la de Moneixas, donde la organización de Francisco Vilariño se granjeó el respaldo del 41% de los votantes. Vilanova (24) y Lalín de Arriba (18) fueron los territorios que más confiaron en los nacionalistas. Y donde menos, en Bendoiro (2,86), Sello (3,54) y Xaxán (5,11).

Voto urbano

Si dejamos a un lado el voto rural y nos centramos en los resultados del las 11 mesas distribuidas por el pabellón municipal para los residentes en el núcleo urbano, podemos sacar estas conclusiones. El PP se movió entre el 42 y el 50,1 por ciento de apoyos; Compromiso entre el 20 y el 22,4 por ciento y el PSOE logró el mejor dato en una mesa con el 21,3% de las papeletas válidas y donde menos apoyo cosechó se quedó en el 16 por ciento. Por último, el BNG se movió entre el 12,7 y el 8,4 por ciento de apoyos en las urnas urbanas.

¿Son los políticos profetas en su tierra”

En ocasiones los políticos despiertan más simpatías fuera que dentro de su propia tierra y son muchos los casos en los que hay representantes públicos con gran reconocimiento y tirón popular, a los que les cuesta ganar en casa. En Lalín algunos de sus candidatos están empadronados en su lugar de nacimiento y otros lo han ajustado al de residencia. ¿Cómo le han ido las cosas a los alcaldables en sus áreas de influencia?. El popular José Crespo es natural de Xaxán pero reside en Filgueira y en ambas mesas su partido se impuso con claridad pero, en la de su parroquia natal pasó de 177 votos en 2019 a 1155 el pasado domingo. El retroceso en la de Filgueira fue más moderado y de 236 papeletas se quedó en 220. Rafael Cuíña está empadronado, como Crespo, en Filgueira. Si hace cuatro años no llegó al centenar de apoyos –fueron 91– ahora su partido bajó hasta los 61; es decir, una treintena menos. Mayor caída sufrió en Prado, parroquia a la que está vinculada parte de su familia, donde cosechó 48 votos; un 36% menos. La socialista Alba Forno está muy ligada a Camposancos, parroquia que votó de manera conjunta con Cercio. El PSOE se impuso en esa mesa en 2019, con 176 apoyos, que ahora se quedaron en 81. Los mismos tuvo el BNG en Moneixas, donde vive Francisco Vilariño, un 37% más que hace cuatro años, y fue la lista más votada.

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