Intervienen en Lalín y Dozón botellas de licor con precintos fiscales no activados

La Guardia Civil informa de la puesta en marcha de la investigación a un total de cinco empresas de la provincia de Pontevedra, entre las que se encuentran varias en Dozón y Lalín, que comercializaban botellas de licor sin la pertinente activación del precinto fiscal e incluso otras que carecían del mismo. La Patrulla Fiscal y de Fronteras de la Guardia Civil de Marín, observó recientemente que en un local de Moaña se vendían botellas de licor con la etiqueta sanitaria, pero sin precintos fiscales. Tras su aprehensión y denuncia por infracción a la Ley de Impuestos Especiales, iniciaron una investigación para conocer la procedencia de estos licores, según informa la OPC de la comandancia de Pontevedra.

Simultáneamente, con el apoyo de la Patrulla de Fiscal y de Fronteras de la Guardia Civil de Vigo se inspeccionó el local de la empresa distribuidora de licores, ubicada en O Porriño, encontrando un total de 200 botellas de alcohol que si bien tenían precinto fiscal colocado, no acreditaba el pago del impuesto devengado, por lo que se procedió a la intervención de las mismas por parte de los agentes de la Benemérita. Posteriormente, se realizó una inspección a la empresa fabricante de licores, sita en el concello de Dozón, en la que se intervinieron 240 botellas de diferentes alcoholes, que a pesar de tener el precinto fiscal, no estaba acreditado el pago del impuesto devengado. Además se realizaron inspecciones a dos comercios más ubicados tanto en Dozón como en Lalín.

Garrafas sin dar de alta

Finalmente fueron inspeccionadas cinco empresas entre las situadas en la comarca de Deza y las sitas en las de A Louriña y O Morrazo, siendo precintadas entre todas ellas 457 botellas de licor y 31 garrafas de 3 litros de capacidad cada una, cuyos precintos no habían sido dados de alta, y por tanto, no estaba acreditado el pago del impuesto devengado obligatorio por la legislación actual vigente. La mercancía ha quedado depositada y precintada en las distintas empresas implicadas y, también, ha pasado a disposición de la autoridad administrativa competente.

Por otro lado, un representante de la empresa y del resto de establecimientos afectados, aclaró ayer a esta Redacción que “un técnico de la autoridad competente, doce horas después, y comprobando que todo era correcto, indicó que se podría disponer de todo”. Cabe resaltar que con esta orden “no hubo necesidad de que la Guardia Civil acudiese a ninguno de los establecementos”, concluyó.

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