A Estrada: 16 años contra la brecha digital

Desde el despliegue de la red inalámbrica de la Cidade Dixital en enero de 2007, la Fundación Cultural es hoy un operador que combina la oferta de wifi, telefonía móvil y fibra, dentro y fuera del municipio estradense

En enero de 2007 se inauguró la red inalámbrica de la Cidade Dixital. |   // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

En enero de 2007 se inauguró la red inalámbrica de la Cidade Dixital. | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN / Ana Cela

Ana Cela

Ana Cela

Enero de 2007. Un autobús partió de las inmediaciones del consistorio estradense. Destino: Guimarei. Poca distancia para el gran salto que se pretendía dar en esa misma mañana. Aquel 29 de enero de hace 16 años el municipio estradense se lanzaba a una red sin hilos, específicamente tejida para superar la brecha digital entre el ámbito urbano y el rural, buscando que la ciudadanía estradense en su conjunto tuviese la oportunidad de incorporarse plenamente a la sociedad de información. En aquella fría mañana la bautizada como Cidade Dixital estrenó la red inalámbrica de conexión a internet con la que la Fundación Cultural da Estrada –ente público ligado a la administración municipal– se convirtió en operador de la red Aestradadixital.

Para llegar a aquel momento hicieron falta años de trabajo previo. Fue necesario dar los primeros pasos de un programa que ansiaba favorecer el acceso a internet sin necesidad de cables en las 51 parroquias de A Estrada y en sus 473 núcleos de población. Aquella red sin hilos estaba llamada a superar los múltiples obstáculos que se pudiesen presentar para cubrir un ámbito territorial eminentemente rural y con nada menos que 282 kilómetros cuadrados. Sin duda, todo un desafío.

Desde aquel 29 de enero el objetivo primordial de la Fundación Cultural fue proporcionar un servicio universal, pretensión que la llevó a convertirse en operador gracias al permiso de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) que obtuvo en 2005. Su carta de presentación al mundo se diseñó en base a cuatro pilares fundamentales: sin menos calidad que un ADSL, sin limitación física de conexión, sin pérdidas de señal y sin limitaciones de uso. Simplificado: sin hilos.

Por diez euros al mes

Fue una propuesta pionera por sus características y complejidad técnica. Desde aquel día en que los portátiles testaron en Guimarei la posibilidad de conectarse a internet haciendo uso de esta red sin necesidad de cables y en un entorno rural se abrió un período de conexión completamente gratuita, diseñando para después una tarifa plana al alcance de la mayor parte de los bolsillos: a partir de 10 euros al mes.

Bajo el nombre de A Estrada Dixital sen fíos, el Concello abanderó, hace ahora 16 años, una experiencia única en Galicia y en España, si se atiende a la capacidad de conexión que pretendía garantizar en un escenario geográfico tan amplio. Desde la Cidade Dixital se aseguró entonces que en la Unión Europea existían contados casos de proyectos de estas características, referenciados en países como Finlandia o Irlanda.

¿Cómo se llegó a esto? Pues, auspiciado por fondos europeos, el Concello de A Estrada ejecutó el despliegue de una red del que se encargó la empresa Tecnocom (antigua Softgal) y que contó con un desembolso de 567.000 euros. Fue posible en base a la combinación de tres tecnologías inalámbricas: wifi, wimax y mesh. Su arquitectura se concibió con diferencias entre el ámbito urbano y el rural, de tal manera que para que acercar la sociedad de la información a las aldeas estradenses se usaba wimax y wifi, mientras que en el casco urbano esta última tecnología se combinó con una red mallada (mesh). No obstante, la conexión final para todos los usuarios la garantizaba la wifi, apoyándose en un primer momento en un total de 73 emplazamientos y 86 puntos de acceso.

En estos años el despliegue no ha parado de crecer. El estradense Diego Pernas es ahora gerente del proyecto. |   // BERNABÉ

El gerente de A Estrada Dixital, Diego Pernas. / Bernabé

Aquello fue solo el principio. Toda la infraestructura tuvo que ir creciendo para adaptarse a las necesidades de unos años en los que el acceso a internet es algo completamente incuestionable y necesario en el día a día.

Fue así como, en junio de 2021, llegó la fibra. La Fundación Cultural subió la apuesta y comenzó a diversificar los servicios ofrecidos a la ciudadanía, sumando telefonía móvil y conexión a internet por fibra óptica, tanto en la villa como en las parroquias en las que ya se encontraba realizado el despliegue de esta tecnología al abrigo de los acuerdos entre las diferentes administraciones.

En calidad de operador virtual, A Estrada Dixital ofrece sus servicios aprovechando la fibra que grandes operadores realizaron –de forma subvencionada por las administraciones públicas– en el ámbito rural y que ya hace años que está disponible en la capital estradense.

Múltiples opciones

La oferta como operador que ha configurado la Cidade Dixital partiendo de estos años de experiencia es amplia (www.aestradadixital.gal). Se ofrece al consumidor wifi –un servicio básico de acceso por 12,10 euros al mes o una conexión de alta capacidad apta para un uso intensivo de internet, válido para la conexión a plataformas digitales o el teletrabajo, por ejemplo, por 22,87 euros–; fibra –con fijo, en paquetes de 300 Mb por 29,95 y de 600 Mb por 39,95–; telefonía –cinco opciones, todas con llamadas ilimitadas desde 6,95 a 24,95 euros al mes, en función de los datos– y paquetes que combinan la fibra y dos líneas de telefonía móvil (por 39,95 y 49,95 euros mensuales). La cobertura desde terminales móviles es 4G sobre las redes de Yoigo, Orange y Movistar.

A Estrada: 16 años contra la brecha digital

La infraestructura de esta red no ha parado de crecer en estos 16 años. / Bernabé

El gerente de A Estrada Dixital, Diego Pernas, concretó ayer que en estos momentos este operador cuenta con casi un millar de usuarios de su red inalámbrica. Este servicio se ha ido extendiendo más allá de el término municipal estradense, ofreciendo conexión a municipios limítrofes. De este modo, la Cidade Dixital estradense tiene usuarios de Cuntis o Teo, por ejemplo.

Como operador de fibra, sus servicios se han extendido a toda Galicia ya que, al utilizar la fibra de las grandes compañías pueden dar servicio en cualquier lugar. De este modo, A Estrada Dixital tiene clientes de Santiago, Ourense o Pontevedra. La contratación de fuera del municipio representa entre el 5 y el 10% sobre el total y se vincula, en muchos casos, a gente de A Estrada que reside en otros lugares.

En estos momentos los paquetes de fibra y telefonía se vinculan a alrededor de 800 líneas vivas –móviles y fibra–, que representan alrededor de 350 contratos, si bien se aclara que resulta complicado ser precisos con estos datos porque existen usuarios con varios contratos a su nombre, además de clientes que tienen contratado solo móvil o el pack que combina los dos productos.

“Aportamos riqueza a nuestro pueblo implantando las mejores soluciones según cada necesidad y favoreciendo la economía de proximidad. A Estrada Dixital nació con el objetivo de llegar a todos los hogares con la máxima calidad de conexión y ahora también con telefonía. ¿Podías pedir algo más?” La carta de presentación ha cambiado en 16 años. La ciudad ha crecido.

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