La Consellería de Medio Ambiente, a través del Instituto de Estudos de Territorio, aprovecha la fiebre por el ciclismo, desatada desde la pandemia, y acaba de presentar la guía interactiva A paisaxe de Galicia dende a bicicleta. Esta guía tiene un formato de visor, de modo que el internauta puede diseñar rutas a su medida entre las 52 planteadas. Además, de cada tramo se ofrecen fotografías de las zonas más relevantes a visitar, ya sea a nivel arquitectónico o paisajístico. El usuario puede descargar y planificar el recorrido en dispositivos diferentes, desde un reloj inteligente hasta un teléfono móvil o GPS.
La meta, en Antas de Ulla
De ese medio centenar de rutas, hay dos que discurren por tierras dezanas, y ambas tiene como meta Antas de Ulla, el centro geográfico de la comunidad gallega. Una de las rutas parte de la Praza da Igrexa de Lalín y puede cubrirse en una única etapa de 29,30 kilómetros. Es, obviamente, una ruta lineal, que puede cubrirse en tres horas y media. La guía señala que el punto más alto de este trazado está a 820 metros, y el más bajo, a 496. Transcurre, sobre todo, por pistas asfaltadas (son el 43% de todo el trayecto), así como por pistas sin asfaltar (el 25%), caminos y senderos (el 19) y por carretera (el 13%). Su nivel de dificultad es duro, y el recorrido tiene un trazado similar al de la N-640 a su paso por Deza. Las personas que cubran esta ruta pasaran por Rodeiro y Agolada, teniendo ocasión de disfrutar de parajes como el puente de Pedroso sobre el río Arnego o la cercanía del Monte Farelo.
La otra ruta también remata en el concello vecino de Antas de Ulla, pero arranca en la Praza de Santa Ana, en Chantada. Es también un trazado lineal, muy difícil, con un recorrido de 34 kilómetros que pueden cubrirse en 3 horas y 25 minutos. La altura máxima a la que llegarán los y las ciclistas son 1.108 metros, dado que uno de los puntos que incluye es el Monte Faro, límite natural entre Chantada y Rodeiro. Su diseño discurre, además de por Camba, también por tierras agoladesas. En cuanto a la altura mínima a la que se encontrarán los deportistas, es similar a la de la ruta por Lalín, 488 metros. Como en el caso anterior, se circulará sobre todo por pistas asfaltadas (en el 51% de todo el trayecto) y sin asfaltar (el 30%).
No pasa por tierras dezanas, pero sí muy cerca, el itinerario para bicicletas que enlaza Melide con, también, Antas de Ulla. Sus 36 kilómetros de trayecto pueden cubrirse en dos horas y media, y ofrecen paradas obligadas como la del castillo de Pambre, en Palas de Rei.
La guía, realizada en colaboración con la Federación Galega de Ciclismo, también incluye una ruta circular por el valle de Ulla, en terrenos del concello de Vedra.