La clarinetista estradense Belén Troitiño Dono ha sido una de las tres ganadoras de los premios extraordinarios en las enseñanzas artísticas profesionales dentro de la modalidad de Música. Con estos galardones, la Xunta de Galicia reconoce y valora públicamente los méritos académicos y artísticos excepcionales basados en el esfuerzo y en el trabajo de los alumnos que finalizaron sus estudios en el curso 2020/21 con un excelente resultado académico. La clarinetista es la primera alumna del Conservatorio Profesional de Música de A Estrada que consigue este importante reconocimiento.

Para optar a estos premios las personas aspirantes debían contar con una nota media igual o superior a 8,75 en los dos últimos cursos de las enseñanzas profesionales, en la modalidad de Música. Además, debían realizar una interpretación como solista y presentar una copia de una grabación de vídeo en la cual interpretaban tres piezas de diferentes estilos, de una dificultad no inferior al nivel de sexto curso de enseñanzas profesionales de Música. Finalmente, Troitiño terminó llevándose un reconocimiento que ningún otro alumno del conservatorio de A Estrada había logrado hasta ahora.

La estradense recibió este premio en el País Vasco, a donde se trasladó hace poco más de un mes para continuar sus estudios en el Conservatorio Superior Musikene de Donostia. A sus 18 años, Troitiño tiene ahora cuatro años más de formación superior, una formación que asume con naturalidad mientras apunta a su gran objetivo personal, llegar a tocar algún día en una orquesta. “Sé que es algo muy complicado, porque hay mucha gente que busca lo mismo y gente muy buena y a lo mejor solo para una plaza”, reconoce. Eso no amedrenta sin embargo a esta joven nacida en San Xurxo de Cereixo cuya pasión por la música le viene desde muy pequeña.

Troitiño recuerda que se inició en este mundo con solo cuatro años, cuando comenzó a realizar trabajo de base en el conservatorio de A Estrada. Esos tres años la animaron a seguir y la acercaron al instrumento al que terminaría dedicando su vida, el clarinete. “No sé realmente por qué fue el instrumento que elegí. Sí que recuerdo que, después de probar varios, fue el que más me gustó de todos”, explica muchos años después de aquella formación de base. A partir de los siete y hasta los 18 siguió su formación en A Estrada, que acabó el pasado verano con el premio Fin de Grado de sus estudios profesionales.

Este nuevo e importante reconocimiento cobra especial valor para Troitiño teniendo en cuenta el complicado momento en el que tuvo que presentarse. “Fueron unos meses de locura con muchas horas de trabajo. Tenía las pruebas de la ABAU, acabar el grado profesional y también preparar las pruebas para entrar en el grado superior de música. Y en medio preparé el vídeo para este premio extraordinario. Todavía no sé cómo sobreviví a esos meses”, bromea.

Conservatorio superior Musikene de Donostia

Belén Troitiño dejó A Estrada hace poco más de un mes para embarcarse en una nueva aventura personal. La estradense fue seleccionada por el Conservatorio Superior de Música Musikene de Donostia, donde ha iniciado sus estudios superiores. “Me hablaron muy bien de este conservatorio y de un profesor muy bueno que tiene, así que hice las pruebas de acceso y tuve la suerte de que me cogieron”, explica la clarinetista, quien reconoce el importante cambio a nivel personal. “He pasado de vivir con mis padres en un pueblo pequeño a tener que vivir yo sola en una cuidad y muy lejos de casa. Sabía que no iba a ser fácil adaptarme pero al final, en un par de semanas, ya fui encontrándome más cómoda”, afirma al tiempo que destaca algo que no ha cambiado en su vida a pesar del traslado al País Vasco, la música.